Estas son las posturas más románticas para disfrutar en la intimidad

El sexo va mucho más allá de ser una expresión de intimidad, como explican algunos expertos en esta temática. Este tipo de relaciones permiten generar oportunidades para el fortalecimiento de lazos emocionales y avivan el romance entre las parejas.

No es un mito eso que dice que las posturas pueden jugar un papel importante en la creación de una conexión más profunda y romántica. Desde aquellas poses que ya se han vuelto tradicionales, hasta unas que son un poco más atrevidas pueden ser exploradas para darle un toque especial a su relación de pareja.

Las poses más románticas

Una de las consideradas como las más románticas y, además, por ser una de las más comunes es la cuchara conocida por su nivel de intimidad y ternura. En esta la pareja se acuesta de costado dejando los cuerpos uno contra otro. Es una de las más sensuales porque permite el contacto piel con piel y facilita el abrazo mientras se da la penetración. Desde la sexología se piensa que fomenta la cercanía emocional y el sentimiento de protección.

Otra de las clásicas y muy románticas es la famosa pose del misionero. En esta los “amantes” se pueden mirar a los ojos y cogerse las manos mientras entran en una conexión intima. De esta se dice que da pie para una comunicación visual profunda y ofrece una sensación de vínculo emocional más intenso.

Una infaltable es la de la mariposa, que es una especie de variante del misionero. Esta otorga un nivel mucho más alto de intimidad y romance. Para hacerla, se levanta la pierna y se pone sobre el hombro de la pareja mientras el hombre se arrodilla. Esta posición permite un mayor contacto visual, así como un acceso más profundo y estimulante. La conexión visual y la sensación de entrega mutua pueden intensificar la experiencia romántica y sexual.

Hay una pose que reafirma la cercanía emocional y física entre los amantes. En esta posición, los miembros de la pareja se acuestan de lado, frente a frente, y se abrazan íntimamente. Esta postura permite el contacto piel con piel y la posibilidad de besos y caricias en todo el cuerpo. Es una forma hermosa de conectarse emocionalmente y explorar la intimidad en un nivel profundo.

Por último está la posición del columpio. En esta se requiere un poco de esfuerzo adicional, aunque es una postura muy romántica y algo divertida. Uno de los miembros de la pareja debe acostarse en el borde de la cama o en una superficie un poco más elevada. El otro deberá arrodillarse y ponerse en frente.

La persona que se encuentra en el borde de la cama puede balancear las piernas arriba y abajo para agregar un toque juguetón y romántico.

La comunicación abierta y el respeto es fundamental para explorar y disfrutar estas posturas de manera segura y consensuada. Una de las invitaciones es experimentar y conocer las posturas románticas que te puedan llevar a una conexión más profunda con tu pareja.