Día de la Madre
Síndrome de la mamá helicóptero
Hay una fina línea entre cuidar con dedicación a los hijos y ser sobreprotectora, recuerda que vigilarlos exageradamente trae consecuencias negativas a largo plazo.
Luca, un niño italiano, fue noticia hace un tiempo porque había sido sobreprotegido al punto de no tener un desarrollo motriz normal a sus 12 años. El caso se tomó los medios de comunicación y abrió el debate de si el amor excesivo de su madre y sus abuelos representaba una forma de abuso infantil. Según la revista Time, durante el proceso judicial los fiscales presentaron evidencia de que a Luca no se le permitía jugar con otros niños, ir a la iglesia, practicar deportes, ni salir antes o después de la escuela.
Aunque este parece un caso extremo, lo preocupante es que cada vez son más frecuentes las madres sobreprotectoras o que sufren del síndrome que describieron Foster W. Cline y Jim Fay en su libro “Ser padres con amor y lógica”, como el de la mamá helicóptero.
Estas mujeres son aquellas que sobrevuelan a sus hijos constantemente con el ánimo de buscar lo mejor para ellos pero terminan perjudicándolos de manera irreversible, ¿por qué ocurre este fenómeno?
Según la sicóloga clínica y directora de investigación de la asociación Glendon, Lisa Firestone, cuando los padres no reconocen que sus hijos son capaces de hacer cosas por sí mimos, los auxilian haciéndoles creer que necesitan más cuidado y atención del que es realmente necesario. Las mamás que tienen a ignorar que su hijo es una persona independiente y dueña de sus actos suelen convertirse en sobreprotectoras.
Firestone reconoce que las nuevas generaciones de padres han reivindicado el papel de los niños como personas que tienen voz y merecen ser escuchados con respeto y consideración en su casa, pero cuando este rol se exagera y se hace demasiado por los hijos se les crea dependencia e inseguridad.
El problema de la crianza al estilo mamá helicóptero se ve a largo plazo. Un cuidado excesivo y desproporcionado forma hijos que no aprenden a asumir responsabilidades porque siempre hay alguien que lo hace por ellos, son inseguros porque nunca tienen la oportunidad de decidir solos y equivocarse, y son dependientes de la aprobación de los otros porque no tienen autoconfianza.
¿Cómo evitarlo?
Es indispensable evaluar las actitudes que se tienen como mamá, no es fácil ser objetiva y medir hasta qué punto se está cuidando a un hijo o se le está haciendo un daño, por eso lo aconsejable es escuchar a las demás personas que hacen parte del proceso de crianza en caso de que ellas detecten un cuidado excesivo. También es posible autoidentificar conductas propias de las madres sobreprotectoras y tomar medidas:
Comportamientos típicos de las mamás helicóptero:
• Tratan de prevenir que sus hijos corran algún riesgo
• Inventan excusas para que su hijo quede bien, por ejemplo que está enfermo para que el niño no quede mal por no llevar la tarea
• Le facilitan todo a sus hijos, aun cuando ellos podrían hacerlo por ellos mismos
• Son voluntarios en todos los comités escolares para poder estar cerca de los niños
• Llevan regalos a los profesores del colegio buscando un trato especial para con sus hijos
• Evitan que tus hijos experimenten fracaso, desacuerdo y dolor
• Buscan controlar el destino de sus hijos, los inducen a tomar las decisiones que ellas esperan.