“Me fui pitando como loca”: Sara Uribe casi pierde a su mamá, luego de que su hijo se enfermó

Los últimos meses no han sido fáciles para Sara Uribe. A pesar de su despampanante personalidad con la que intenta mirar lo positivo de cada situación, lo cierto es que a veces los momentos difíciles la sobrepasan y en redes sociales expresa los momentos incómodos que ha tenido que vivir.

La empresaria vivió una mediática relación con Fredy Guarín. A pesar de que el romance no terminó en buenos términos, de este romance nació el único hijo de Sara, Jacobo. El pequeño de tres años es el centro de atención de la modelo y hace poco le robó lágrimas a su madre por la salud del menor.

Hace poco, Uribe pasó noches en la clínica porque su hijo había sido operado de las amígdalas y de los adenoides: “Aquí donde me ven, he pasado tres noches sin dormir bien. Tengo muchas ojeras (...) Me tocó dejarlo para que me lo cuiden muy bien para ir a trabajar, pero aquí estamos, al pie del cañón”.

El drama que vivió Sara Uribe por el grave estado de salud de su madre

Después de la situación que vivió con su hijo Jacobo en el hospital, Sara Uribe pasó por un momento peor con su madre. Hace unos meses, la modelo confesó que su progenitora sufría de fibromialgia, una enfermedad de por vida que le produce fuertes dolores en los músculos y en los huesos:

“Mi mamá sufre de fibromialgia y lleva muchísimos años consumiendo medicamentos para el dolor, esos medicamentos ya no hacen efecto en su cuerpo. Eso genera una ansiedad y adicción muy fuertes, ojalá tú no estés pasando por esto. No solamente está enferma mi mamá, estamos enfermos en la familia, los hijos, y nos duele verla con este dolor”.

En las historias de su cuenta oficial de Instagram, donde tiene más de seis millones de seguidores, Sara confesó que a pocos días después de estar en el hospital con su hijo, tuvo unos días muy ajetreados de trabajo, pero el sábado la llamaron por su madre:

“Me llamaron de la clínica donde mamá llevaba dos meses y me dicen que debo llevarla a otra clínica porque estaba muy malita (a buscar ambulancia y cupo pa’ que la atiendan) (...) No es la primera vez que me toca subirme a una ambulancia y tampoco la última en pegármele en el carro a como dé lugar e irme detrás pitando como loca”.

Sara también confesó que estaba segura que su mamá se iba y “tenía miedo de no volverla a ver”, pero también comenta que el cambio de clínica fue beneficioso para su madre.