“Llegó alguien y siento paz”: Carolina Cruz se sinceró con mensaje y habló del momento que está viviendo

Carolina Cruz es una de las presentadoras de televisión más queridas por los colombianos. La mujer ha estado inmersa en los medios de comunicación desde hace varios años y siempre se ha caracterizado por su encantadora personalidad. Por tal motivo, suma más de siete millones de seguidores en las redes sociales.

Allí comparte momentos tanto de su vida laboral como de su vida personal. Hace un par de meses sorprendió a muchos internautas cuando anunció que se separó de Lincoln Palomeque, con quien estuvo sentimentalmente por más de una década. Si bien los rumores de una ruptura venían desde hace meses, algunos esperaban que no fueran ciertos.

A pesar de que ya no están juntos como pareja, siguen conservando la comunicación, pues ambos confesaron que siempre iban a ser un equipo en pro del bienestar de sus dos hijos, Matías y Salvador. Y hasta el momento así ha sido, ya que han dejado en evidencia que tienen una buena relación, eso sí, como amigos y papás.

El mensaje de Carolina Cruz puso a pensar a más de uno si ya tiene nueva pareja

Por otra parte, a Carolina Cruz le encanta interactuar con sus seguidores, por lo que constantemente habilita la caja de preguntas en su Instagram. Hace poco lo hizo y dio de qué hablar, pues manifestó que sí le gustaría volver a enamorarse, pero por ahora no es algo que le preocupe.

Sin embargo, recientemente la presentadora de “Día a Día” compartió un fragmento del libro Manual para soportar tornados, del escritor Víctor Hernández y puso a pensar a más de uno si ya tiene una nueva pareja sentimental, pues se trata de un poema muy amoroso, el cual se llama: “Llegó alguien”.

“Llegó alguien a quererme y abrazarme bonito. Me cobija en noches de frío y me prepara un té si no me siento bien. Me escucha a cada instante. Llegó alguien y siento paz. (...) Llora conmigo cuando mi mundo oscurece. Ríe conmigo cuando hay claridad. No me suelta, nunca lo hace”, dice parte del texto.

Hasta este punto muchos internautas consideraron que la tulueña se estaba enamorando de otra persona; no obstante, al final del poema se evidencia que está hablando del amor propio: “Llegó alguien y he aprendido a amarle con todos sus defectos, con su sonrisa bonita y esa cicatriz en la rodilla. Me enamora que le veo frente a mi espejo. Llegó alguien, llegué yo”.