¿El suspenso y la sensualidad iban de la mano en el cine? Top 4 de los mejores thrillers eróticos

El cine siempre ha sido un gran escenario que permite explorar y jugar con sus géneros al crear una historia. Por eso, es bastante común que en las películas los directores incluyen momentos de acción, drama, romance, comedia o terror, combinándolos pero por supuesto lo más arriesgados no olviden que existe el cine erótico.

Aunque no se exceden en lo vulgar o en escenas demasiado gráficas, en el pasado era muy concurrente que los cineastas hicieran thrillers con tonos que incluían sensualidad y juegos eróticos que le daban un aire bastante particular a las historias en medio del suspenso, el terror y el crimen que suelen tener las producciones de este género.

Por eso a continuación recordamos algunos de los thrillers eróticos más exitosos de la historia.

Hace algunos años el directo italiano, Luca Guadagnino, hizo un último gran thriller erótico títulado A Bigger Splash. Allí se muestra la historia de una estrella de rock encarnada por la actriz Tilda Winston, quien se va de vacaciones con su pareja, pero son acompañados sorpresivamente por el ex de ella, que llega junto a su hija bastante juguetona.

Aunque la crítica estuvo bastante dividida la película llamó la atención por la manera de contar la historia y su final.

Entre los clásicos tenemos también la historia del director David Lynch, titulada  ‘Terciopelo azul’ que se estrenó en 1986. La película que de nuevo trata de un misterioso crimen a resolver siguiendo las premisas de un thriller, tal como reseña su sinopsis trata la historia de Jeffrey Beaumont luego de encontrar una oreja humana semidevorada por las hormigas e intentar descubrir su origen junto a un detective y la hija de este.

Por otro lado, tenemos al siempre bien referenciado Stanley Kubrick con su película ‘Ojos bien cerrados’ lanzada en 1999.

La sinopsis reseñada por Sensacine destaca que la producción retrata a “William Harford es un exitoso médico que vive con su esposa Alice y Helena, su hija de siete años, en un lujoso departamento muy cerca de Central Park, en Nueva York. Como cada año la pareja acude a una fiesta de Navidad ofrecida por Victor Ziegler, uno de los acaudalados pacientes de William. Durante la fiesta William platica con Nick Nightingale, un pianista que le cuenta que asiste a fiestas clandestinas en las que se realizan actos sexuales y orgías”.

Por último, pero no menos importante tenemos a uno de los directores más icónicos del cine y que por supuesto también se adentró en el mundo de los thrillers eróticos con ‘Matador’ en 1986.

Allí se cuenta la historia de “un torero retirado de forma anticipada se da cuenta de que su obsesión por la muerte perdura, pero ahora sustituye a los toros por mujeres a las que mata mientras hacen el amor”.