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Carolina Gómez contó cómo enfrenta el sentimiento de dolor para sacar lo mejor de cada situación

Fucsia.co, 3/4/2023

Actualmente la exreina de belleza es la protagonista de ‘Ventino’, producción de Caracol Televisión.

La actriz habló de sus cuidados de belleza.
Carolina Gómez - Foto: YouTube Caracol Televisión

Carolina Gómez es considerada como una de las mujeres más bellas y talentosas de la farándula colombiana. Su imagen en las últimas semanas sido tendencia por su participación en la telenovela ‘Ventino, el precio de la gloria’, de Caracol Televisión, donde interpreta a Martina Pumarejo, la villana de la historia.

En cada capítulo de esta producción, la exreina de belleza ha sorprendido a los televidentes al darle vida a una mujer que contrario a lo que ella es en la vida real, refleja una impresionante sed venganza y toma decisiones bastante crueles.

A pesar de ello, la famosa confesó que sin duda alguna esta ha sido una de sus experiencias en la televisión más enriquecedoras, pues a su parecer ha podido sacar “varias cositas escondidas que tenía”, pero que nunca había soltado porque no era el momento.

“Me encanta, la verdad es que uno de los placeres de actuar es sacar esos personajes”, comentó durante el lanzamiento de la novela en Caracol.

Por otro lado, señaló que le ha parecido “muy divertido ver como una mujer que aparentemente en papel y en foto se puede ver dulce y exitosa, muestra esa calaña de ser humano que es”.

La exreina habló de la imagen y el cuidado de belleza que lleva.
La exreina habló de la imagen y el cuidado de belleza que lleva. | Foto: @carogomezfilm

Respecto a sus personajes como villana, resaltó que considera que se ha dado la oportunidad perfecta para “sacarla del estadio” porque Martina “les pondrá la vida de cabeza” no solo a los otros personajes de la historia, sino también a los televidentes.

“El dolor me permito sentirlo como viene y como es”

Recientemente, en entrevista para la revista Vea, Carolina Gómez decidió abrir su corazón para hablar sobre su vida y cómo enfrenta el sentimiento de dolor para sacar lo mejor de cada situación.

Según su relato, a sus 49 años ha logrado sentir la seguridad, el equilibrio y la plenitud que no tenía a sus 20 o 30 años.

“El dolor me permito sentirlo como viene y como es. El dolor es inevitable, dolor siempre va a haber y si no lo afrontas y lo metes en un armario, ese esqueleto se va a abrir y va a salir a cobrar factura… ya me pasó de hecho, lo digo con conocimiento. No hay felicidad sin dolor; no hay felicidad sin duda. Hace parte de la vida”, comentó.

Foto: Instagram @carogomezfilm
Foto: Instagram @carogomezfilm | Foto: Captura de pantalla / Instagram / Montaje

Sobre su manera de manejar este sentimiento, la actriz confesó que la clave está en conectarse con ella misma sin encajar en ninguna religión.

“En momentos difíciles de mi vida he recurrido a la meditación, al ejercicio, y sobre todo, a la espiritualidad… Me conecto conmigo misma, no soy católica, ni judía, ni budista, aplico la teología del amor, parto de la base de amarse a uno mismo, de ser compasivo. Entender que todo pasa y decir ´esto también pasará. En momentos de dificultad mis hermanos han sido un apoyo”, aseguró.

Aunque sabe que desde hace años es considerada como la mujer más bella de Colombia, Gómez resaltó que es en este momento de su vida en el que realmente se siente de esa manera.

“Una de las cosas más lindas de los 40 es que es un momento en que uno dice: ´esto es lo que hay´… y hay una comodidad en la piel de uno, nos pasa a la mayoría de las mujeres. Ese es el atractivo de las mujeres después de los 40, nos empezamos a acomodar lentamente y cuando nos sentimos bellas a los 40 se nos nota, es impresionante, uno emana otra cosa que es muy atractiva, no hablo del prototipo de belleza”, expresó.

Carolina usa su sensualidad para crear conciencia sobre la vida. Foto: Instagram @carogomezfilm.
Carolina usa su sensualidad para crear conciencia sobre la vida. Foto: Instagram @carogomezfilm. | Foto: Foto: Instagram @carogomezfilm.

“Es curioso, cuando uno tiene 20, todo está bien puesto, en la carita nada se cae, no hay una arruga, está lozana, pero falta eso. En los 20 somos muy inseguras, estamos oyendo lo que dice uno, mirando cómo tenemos que cumplir los parámetros de belleza de comportamiento. Después de los 45, uno dice ´no importa´”, concluyó.