No todos los amores son a primera vista

Dicen que el momento en que te ponen a tu bebé sobre el pecho es el más sublime de tu vida, que sientes tanto amor que lloras de la felicidad.

Pues no me pasó. A Benjamín me lo sacaron bruscamente con fórceps mientras tenía a una enfermera encima empujándome la barriga. Cuando me lo pusieron sobre el pecho sentí miedo de la forma en que nació, tristeza por mi cuerpo desgarrado y cortado, y rabia porque las decisiones que tomé sobre mi cuerpo no fueran respetadas.

Vivir ese “momento sublime” de una forma tan diferente me llenó de culpa. Me sentí la peor mamá del mundo y lloré muchas lágrimas antes de entender que los vínculos no se dan por arte de magia, sino que se construyen día a día. Sí, mis hijos no fueron el amor a primera vista que me dijeron, pero no por eso ha sido menos amor o yo menos madre.

La maternidad, como la vida misma, tiene muchas caras y no podemos seguir cargando culpas por sentir o pensar diferente a la única que nos mostraron. Somos muchas compartiendo sentimientos, por eso creo que debemos empezar a hablar de la maternidad como lo que es: un camino de rosas Y ESPINAS, quitémonos culpas de encima y evitémosle a futuras mujeres y mamás transitar caminos dolorosos e innecesarios.

Sobre mí

Sobre mí

Soy Lina Aristizábal. El cartón que me dieron dice que soy politóloga y periodista. En mi corazón soy una madre, yogui y aprendiz de ceramista. Escogí hacer yoga como un camino de sanación y encuentro. Doy clases de yoga para todo tipo de personas, hago sesiones de reiki, doy clases de cerámica y en mis pocos tiempos libres hago platos de cerámica con amor.

Soy una mamá real que siempre te dirá las cosas como son, desde el amor. Soy una persona que diariamente se reta a sí misma para demostrarse que se puede vivir en unión con nuestra esencia divina. ✨En YOGA✨

* Las opiniones dadas por Lina Aristizábal no representan la opinión de la revista Fucsia.