Prendas escultóricas en la nueva colección de Issey Miyake

En la versión más reciente de la Semana de la Moda de París, la firma japonesa Issey Miyake realizó su primera pasarela después de la muerte de su creador. El diseñador falleció a los 84 años el pasado mes de agosto y la fashion week fue el escenario para que el director artístico de la casa Satoshi Kondo le rindiera un merecido homenaje.

Todo comenzó con la proyección de un retrato a blanco y negro de Miyake. De inmediato sonaron los aplausos del público, que dieron paso a un desfile que estuvo acompañado de bailarines y artistas musicales, algo muy característico en los shows del diseñador. Poco a poco empezaron a aparecer los modelos, en una pasarela oscura que se adornaba con un piano y dos grandes obeliscos de tela iluminados por dentro.

Como es habitual, la firma fue revelando su colección ‘A Form That Breathes’ por grupos. Los primeros looks —a blanco y negro— de la serie Torso, dieron las pistas iniciales de la intención de Kondo con esta nueva propuesta: la exploración de elementos y texturas inspirados en el proceso de esculpido para desarrollar formas de prendas originales.

En palabras de la firma, “el equipo de diseño creó a mano la forma escultural del torso, expresándola a través de una sola pieza de tela. El material es firme pero flexible y la silueta tridimensional y el drapeado se crean usando las vestiduras, como una escultura sobre el cuerpo”.

También se vieron volúmenes en los hombros, diseños con una serie de pliegues circulares inspirados en los ciclos de vida y el renacimiento, prendas en punto sin costuras elaboradas en poliester reciclado y, por supuesto, los icónicos plisados. Como novedad, algunos de los diseños están hechos con una fibra vegetal innovadora que evita el uso del petróleo en su origen.

Sobre otra de las series de la colección, en las notas de prensa explican: “Utilizando prendas de punto, Nude presenta una representación gráfica de una escultura abstracta inspirada en el cuerpo. Los paneles interiores están confeccionados con hilo transparente, creando un efecto drapeado y tridimensional en un silueta recta. Los artículos también se pueden usar al revés, lo que permite disfrutarlos desde varios ángulos, al igual que ver una escultura”.

Para cerrar el espectáculo, aparecieron bailarines vestidos en tono crudo que al final se mezclaron con los modelos, para un final al estilo de Miyake: emotivo y lleno de danza, fluidez y movimiento.