¿Cómo enfrentarse a la infertilidad?
Fucsia.co, 18/6/2014
Cuando una pareja decide tener un hijo, no lograrlo naturalmente puede generar inestabilidad emocional y debilitamiento de los lazos afectivos si no se maneja de la forma adecuada. Un experto aconseja a quienes atraviesan por esta situación.
Foto: Ingimage - Foto:
La emoción inicial que producía un posible embarazo, es opacada por la frustración que genera no lograr conseguir el objetivo. Asimismo, la autoestima se puede debilitar, dudando incluso de la virilidad o feminidad de los miembros de la pareja, respectivamente. Así lo asegura el ginecólogo obstetra, Juan Luis Giraldo, autor del libro Buscando un bebé, quien además, señala que las parejas que pasan por esta situación se tienden a aislar de sus familias y amigos por la vergüenza de no ser confrontados; es decir, prefieren mantener su “problema” en secreto.
Pero, ¿qué se debe hacer en estos casos? Giraldo aconseja llevar a cabo algunos pasos:
1. Aceptación. Este es el primer paso y el más importante, pero se debe tener en cuenta que es necesario permitirse la posibilidad de sentir emociones negativas y vivirlas a lo largo del camino. También, agrega, hay que “prepararse para el proceso”, con el fin de “evitar que la carga emocional destruya la relación o la lleve a desistir de su tratamiento, cuando aún existen alternativas médicas para poder obtener un embarazo”.
2. Enfrentar la infertilidad como pareja. “Debe estar claro que no es un problema de uno u otro, que la responsabilidad no recae en el miembro de la pareja que tiene el trastorno físico que causa la infertilidad y que esa condición cobija a los dos”, dice el experto. Vivir el proceso en pareja ayudará a fortalecer la relación y, en el caso de que aún existan alternativas para lograr la concepción, evitará que se rindan. Es esencial mantener la unidad para superar los momentos críticos y emocionalmente difíciles.
3. Estar informados. Esto permitirá que la pareja tenga claridad acerca de qué les espera, no solo en cuanto a tratamientos médicos para su condición, sino además las posibles situaciones de inestabilidad emocional, individuales y en conjunto.
4. La importancia de la comunicación. Es vital que se establezcan canales de comunicación efectivos en la relación para, de esta manera, lograr comprender los sentimientos del otro. “Debe evitarse la comunicación en una sola vía, en la cual es únicamente la mujer quien expresa sus sentimientos. Esta debe ser fluida y servir de desahogo para ambos miembros”, recomienda Giraldo.
5. No descuidar el plano sexual. La pareja debe entender que durante el tratamiento de la infertilidad, la sexualidad será inevitablemente difícil para ambos, ya que la actividad sexual se vuelve una “tarea”, mas no un sinónimo de placer. Sin embargo, este es el momento propicio para atreverse a experimentar, hacer realidad fantasías sexuales y tomarse unos días de esparcimiento en un lugar ajeno al hogar. Se trata, entonces, de buscar alternativas para reavivar la libido de ambos y darse un espacio como pareja.
6. Buscar ayuda. Así como se busca apoyo profesional para la condición física, es igual de importante hacerlo con la mente. Aunque algunas parejas se sienten vulneradas y ofendidas cuando se les sugiere consultar a un psicoterapeuta especializado, hacerlo es clave para no caer en crisis emocionales, que lo único que logran es debilitar los lazos afectivos y hacer que la pareja desista de los tratamientos médicos, hasta lograr con éxito el embarazo.
¿Cuándo es suficiente?
Los tratamientos de infertilidad, según asegura Giraldo, exigen una alta dosis de paciencia y perseverancia: sin embargo, es importante “mantener los pies en la tierra”.
El experto recomienda establecer, desde el inicio, un tiempo estimado para que el tratamiento específico dé los resultados esperados, lo que se debe comunicar al médico tratante.
Cuando la pareja decide que es suficiente, pueden orientarse por otras alternativas como la adopción, o en último caso, la vida sin hijos, enfocándose en proyectos, opciones y oportunidades en otros ámbitos.
Pero, ¿qué se debe hacer en estos casos? Giraldo aconseja llevar a cabo algunos pasos:
1. Aceptación. Este es el primer paso y el más importante, pero se debe tener en cuenta que es necesario permitirse la posibilidad de sentir emociones negativas y vivirlas a lo largo del camino. También, agrega, hay que “prepararse para el proceso”, con el fin de “evitar que la carga emocional destruya la relación o la lleve a desistir de su tratamiento, cuando aún existen alternativas médicas para poder obtener un embarazo”.
2. Enfrentar la infertilidad como pareja. “Debe estar claro que no es un problema de uno u otro, que la responsabilidad no recae en el miembro de la pareja que tiene el trastorno físico que causa la infertilidad y que esa condición cobija a los dos”, dice el experto. Vivir el proceso en pareja ayudará a fortalecer la relación y, en el caso de que aún existan alternativas para lograr la concepción, evitará que se rindan. Es esencial mantener la unidad para superar los momentos críticos y emocionalmente difíciles.
3. Estar informados. Esto permitirá que la pareja tenga claridad acerca de qué les espera, no solo en cuanto a tratamientos médicos para su condición, sino además las posibles situaciones de inestabilidad emocional, individuales y en conjunto.
4. La importancia de la comunicación. Es vital que se establezcan canales de comunicación efectivos en la relación para, de esta manera, lograr comprender los sentimientos del otro. “Debe evitarse la comunicación en una sola vía, en la cual es únicamente la mujer quien expresa sus sentimientos. Esta debe ser fluida y servir de desahogo para ambos miembros”, recomienda Giraldo.
5. No descuidar el plano sexual. La pareja debe entender que durante el tratamiento de la infertilidad, la sexualidad será inevitablemente difícil para ambos, ya que la actividad sexual se vuelve una “tarea”, mas no un sinónimo de placer. Sin embargo, este es el momento propicio para atreverse a experimentar, hacer realidad fantasías sexuales y tomarse unos días de esparcimiento en un lugar ajeno al hogar. Se trata, entonces, de buscar alternativas para reavivar la libido de ambos y darse un espacio como pareja.
6. Buscar ayuda. Así como se busca apoyo profesional para la condición física, es igual de importante hacerlo con la mente. Aunque algunas parejas se sienten vulneradas y ofendidas cuando se les sugiere consultar a un psicoterapeuta especializado, hacerlo es clave para no caer en crisis emocionales, que lo único que logran es debilitar los lazos afectivos y hacer que la pareja desista de los tratamientos médicos, hasta lograr con éxito el embarazo.
¿Cuándo es suficiente?
Los tratamientos de infertilidad, según asegura Giraldo, exigen una alta dosis de paciencia y perseverancia: sin embargo, es importante “mantener los pies en la tierra”.
El experto recomienda establecer, desde el inicio, un tiempo estimado para que el tratamiento específico dé los resultados esperados, lo que se debe comunicar al médico tratante.
Cuando la pareja decide que es suficiente, pueden orientarse por otras alternativas como la adopción, o en último caso, la vida sin hijos, enfocándose en proyectos, opciones y oportunidades en otros ámbitos.
