Mascotas
Las razas de perros que mejor se la llevan con los gatos
Ya es hora de acabar con el mito de que estos animales no pueden llegar a tener una buena convivencia.
A lo largo de nuestras vidas se ha creado el imaginario de que los perros y los gatos se la llevan mal; sin embargo, esto ha sido desmentido, no solo por veterinarios o expertos en el tema, sino por las experiencias de la mayoría de personas que viven con estos dos animalitos.
Sophie Hall, investigadora de la Universidad de Lincoln, comprobó por medio de una investigación publicada en la revista Veterinary Behavior que la convivencia entre estas especies es perfectamente posible.
No obstante, son muchos los factores que se necesitan para que un perro y un gato se la puedan llevar bien. Claramente, es más sencillo cuando desde bebés conviven. No obstante, hasta la presentación de ambos es importante a la hora de que se adapten.
Como lo mencionamos anteriormente, la mejor forma o la más sencilla para que todo salga bien es adquirir a un gatito y un cachorro porque son en las primeras 12 semanas para el can y las primeras 9 para el felino que atraviesan su periodo de desarrollo social. Por lo anterior, si se conocen en este periodo de tiempo, se aceptarán.
Por otra parte, si es el caso de un perro y un gato maduro, si es posible que se lleguen a sentir amenazados y que saquen sus instintos territoriales, aunque poco a poco si los van acercando se acostumbrarán a sus presencias.
Intercambiar mantitas, juguetes y platos de comida, es una gran opción para que ambas especies, por medio del olfato, puedan ir familiarizándose con la otra especie para que cuando llegue la hora de tenerse cerca no sea incómodo o muy molesto.
Igualmente, en caso de que se la lleven mal, la adiestradora canina especializada en modificación de conducta, Mercé Garcia explica que:
“Si tu perro y gato parecen no querer llevarse bien, será muy importante tomar medidas de seguridad para que no ocurra un mal encuentro. No dejes nunca a tu gato y perro juntos en una habitación sin tu supervisión y revisa que el gato pueda refugiarse en su “zona de seguridad” siempre que lo desee. Muestra a ambos el cariño que merecen, pero siempre de forma igualitaria. No mimes en exceso a uno de los dos y empieza siempre con el animal que ya residía en el hogar. Él debe ser siempre el primero en recibir comida y caricias, pero en la misma medida que la nueva mascota”.
Basset Hound, Golden Retriever, Beagle, Cavalier King Charles spaniel, Pug, Bulldog, Collie de pelo largo y el Papillón, son algunas de las razas que caninos, de acuerdo con los veterinarios, que aceptan mucho mejor la presencia de un minino.