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Selena Gómez y Benny Blanco: El anillo que guarda un legado real
El deslumbrante anillo de compromiso de Selena Gomez, valorado en más de 200 mil dólares, tiene raíces históricas que se remontan a la corte de Luis XV.
Con un puñado de imágenes en Instagram, Selena Gomez hizo pública su emocionante noticia: su compromiso con Benny Blanco. Las fotos, que parecen sacadas de un comercial de San Valentín, muestran a la cantante y actriz disfrutando de un romántico picnic al aire libre. La escena, adornada con comida de Taco Bell, botellas de champán y una impecable manicura, fue rematada con una sonrisa radiante que confirma su felicidad.
“Ahora empieza el para siempre”, escribió Selena como descripción de las imágenes. Por su parte, Benny Blanco, con su característico humor, comentó: “Eh, espera... Esa es mi mujer”. Pero la verdadera estrella de este anuncio, además de los novios, es el impresionante anillo de compromiso.
El anillo, una joya con un diamante en talla marquesa, está cuidadosamente engastado sobre una estructura de pavé, lo que resalta aún más su elegancia. La elección de esta forma no parece ser casual. Podría interpretarse como un guiño a “Good For You”, la canción en la que Selena se describe como un “diamante marquesa” capaz de despertar la envidia de Tiffany & Co.
Se estima que el valor de esta joya supera los 200 mil dólares. Sin embargo, su verdadero peso recae en su historia. La talla marquesa, una de las más sofisticadas del mundo de la joyería, se remonta al siglo XVIII, cuando el rey Luis XV encargó a su joyero un diamante inspirado en la sonrisa de su amante, la marquesa de Pompadour. Esta figura histórica, que trascendió como mecenas del arte y confidente del monarca, dio origen a una forma que simboliza elegancia y romance.
La marquesa de Pompadour, cuyo verdadero nombre era Jeanne-Antoinette Poisson, fue mucho más que la amante del rey. Su influencia en la corte fue notable, convirtiéndose en una figura clave para el patrocinio de las artes en Francia. Su relación con Luis XV se extendió más allá de lo romántico, cimentándose como una amistad profunda y una alianza estratégica. La marquesa impulsó la creación de obras de arte, arquitectura y moda que definieron una era de opulencia y refinamiento en el siglo XVIII.
El diamante en forma de marquesa, inspirado en su sonrisa, no solo fue un símbolo de amor, sino también de poder. Esta talla particular, con su diseño alargado y curvilíneo, fue considerada un testamento a la capacidad de Pompadour para dejar una impresión duradera en la historia y en el corazón del rey. Desde entonces, la talla marquesa se ha asociado con la sofisticación y la exclusividad, siendo una elección perfecta para quienes buscan algo con un toque de singularidad y legado.
En épocas más recientes, este estilo ha sido adoptado por figuras icónicas de la cultura pop y la moda, consolidándose como una de las formas más deseadas en los anillos de compromiso. Desde Jackie Kennedy con su histórico “Lesotho III” hasta Jennifer Lopez, Victoria Beckham y ahora Selena Gomez, el diamante marquesa ha demostrado ser una elección atemporal que combina lujo, historia y personalidad.
El compromiso de Selena y Benny no solo celebra el amor entre ambos, sino que añade un capítulo más a la rica tradición de esta emblemática talla.
