“Las mujeres tenemos unas características muy importantes que nos diferencian y que tenemos que saber capitalizar”: Marcela España

Marcela España es la vicepresidente de marketing del Grupo Bimbo para la región Latincentro y durante más de 20 años ha trabajado en el área de mercadeo, sector en el que se ha destacado y el que la ha traído grandes satisfacciones. Su experiencia como líder en una de las panificadoras más grandes del mundo la ha llevado a estar convencida de que la convicción es una de las principales características que llevan a las mujeres a proyectarse en la vida.

“Dentro de la seguridad de cada una de nosotras es que se proyecta lo que queremos en la vida. Cuando sabemos quiénes somos, de qué somos capaces, qué podemos aportar en una compañía, en una empresa, en una sociedad en general, es cuando empezamos a hablar en otro tono, en otra forma, en donde nuestras palabras inspiran y llegan a más personas”.

Las mujeres tenemos la capacidad de dirigir equipos de alto desempeño

Para Marcela España las mujeres tenemos unas capacidades únicas y muy importantes que son las que marcan la diferencia. En la medida en que las cultivemos y explotemos se irán convirtiendo en esas llaves que irán abriendo las puestas de liderazgo y el empoderamiento.

“Por un lado, tenemos una alta capacidad en comunicación, no solamente en asertividad y en empatía, sino también una altísima escucha. Cuando una mujer en una posición en una compañía tiene esas habilidades es capaz de liderar equipos de alto desempeño, es capaz de generar persuasión y motivación, trasciende de ser un jefe a ser un ejemplo, a ser un líder. La disciplina, el autocontrol, la autogestión hay que seguirlas cultivando siempre desde una gestión de prioridad, entender qué es lo urgente y separarlo de lo importante”.

Trabajar para dejar huella

Cuando ya se ocupa un alto cargo ejecutivo, como es el caso de Marcela España, obligatoriamente se comienza a ser un modelo a seguir para quienes hacen parte del equipo de trabajo. Pero ese ejemplo de liderazgo cobra gran sentido cuando lo que se hace comienza a dejar una huella importante no solo en el ámbito profesional, sino en la vida de los demás.

“Un líder que no ejerza su liderazgo desde el ejemplo es un líder que no es creíble, de manera que, entonces, en el momento en el que empiezas a tener posiciones de liderazgo debes tener en cuenta que tienes una cantidad de personitas observándote no solamente en la manera como gestionas tu trabajo, sino, sobre todo y principalmente, en qué tipo de persona eres. Aquí ya no estamos hablando solamente de tener habilidades duras gerenciales o de dirección, sino de que buena persona eres, tu calidad de persona, qué valores transmites, cuál es tu coherencia entre el hacer y el ser”.

La motivación es fundamental para el empoderamiento

La confianza en los equipos empodera y para Marcela España, quien quiere ser líder, debe, ante todo, motivar a su grupo de trabajo y hacerlos sentir que ellos también son buenos ejecutivos y que son buenos líderes potenciales " tener la certeza de que ellos van a llevar a cabo lo que pueden hacer desde el empoderamiento es la mejor manera en que yo puedo inspirarlos a ellos y, por supuesto, desde el ejemplo”.

Además, para alcanzar metas es importante encontrar un equilibrio en la vida de manera que puedas tener en claro como gestionar tu vida laboral, tu familia, tu casa y tus amigos. Marcela tiene muy claras sus prioridades y la que tiene mayor relevancia en su vida es ser mamá, luego viene el resto.

“El equilibrio y el balance es uno de los retos más grandes que tenemos las mujeres en el campo profesional, porque siempre tenemos una presión muy fuerte y todavía tenemos el paradigma de que tenemos que ser la mujer 10 en todos los aspectos y desafortunadamente ser la mujer 10 está ligado a estar presente, como si tuviéramos el don de la ubicuidad, en los diferentes aspectos de la vida (...) he tenido que aprender que se debe gestionar desde la calma, no desde la culpa”

La fortuna de contar con buenos líderes en la vida

Esta ejecutiva ha tenido la suerte de haberse rodeado de líderes buenos y justos que le brindaron grandes enseñanzas en su vida laboral. A nivel personal, su punto de inspiración han sido su familia y los grupos de amigas con las que ha compartido momentos únicos.

“Para mí también son líderes las personas de mi familia, es líder mi padre, fue líder mi madre, que ya hoy en día no está en esta vida. El reflejo de lo que ellos dos inculcaron en mí y en mis hermanos es básicamente ese liderazgo que hemos transmitido(...)y después encuentro un montón de líderes en mi vida, para mí cada amiga que tengo con una historia distinta, independiente de su posición corporativa, es una líder”.

Un círculo de mujeres muy familiar

Su familia ha conformado, en primer lugar, ese círculo de mujeres con lazos fuertes y sentimientos grandes. A través de ellas se ha llenado de aprendizajes y recuerdos que la han hecho crecer como ser humano.

“Los círculos de mujeres están en mi familia que es mi hermana, mis sobrinas, que también son importantísimas para mí; por supuesto, mi hija que, a pesar de que tiene 10 años, es mi mejor maestra, ninguna maestra como Emiliana; mis amigas y también mis compañeras de trabajo que al final he podido ser su amiga, son las mujeres de las que me nutro, me río, me divierto, me estreso, con las que hemos llorado juntas, hemos parrandeado, con las que tenemos la facultad de decirnos cosas lindas, pero que en los momentos que se requieren decirnos verdades para ajustar algunas cosas también lo hacemos”.

Finalmente, si Marcela volviera a sus 10 años le diría a esa pequeña niña que siempre tenga la certeza de que puede conseguir grandes cosas en la vida, que crea firmemente y le apueste a las cosas bonitas:

“Yo tal vez creo que le diría que detrás de la mamá y de cada palabra de una mamá hay una sabiduría inmensa, ya sea por la experiencia de ella misma o por la simple sensibilidad que tiene de mamá y creo que los consejos de una mamá siempre deberían terminar resonando en la mente, pero, sobre todo, en el corazón de todos. También le diría que siga soñando como soñó, que siga proyectándose de la manera como proyectó”.