Tips para no sufrir con la cera
¡Ni una lágrima más! Sigue estos consejos para no sufrir en tu próxima depilación
Ni diamantes, ni zapatos, ni chocolate que no engorde...el sueño de todas las mujeres es que la depilación no duela, sobre todo cuando del biquini se trata. Es que no hay peor calvario que acostarte en la camilla mientras tira tras tira se acumula el odio por el mundo y los convencionalismos. Y aunque en ese momento quisiéramos dejar de hacerlo por al menos un año entero (¿curiosa?, el resultado sería algo así), lo cierto es que no todas estamos dispuestas a lucir esos pelitos de más.
De modo que como algunas no pueden eliminar la depilación de su rutina, revelamos estos truquitos para que al menos no tengan que sufrir.
Elige un profesional adecuado
Por más básico que parezca la realidad es que a veces por motivos de conveniencia, “ya estoy acá cortándome el pelo, mejor aprovecho; económicos, ¡ni crean que me dejo tumbar; o sencillamente porque “me lo recomendó la vecina”, terminamos depositando nuestra confianza en lugares poco profesionales. Pero lo que hasta ahora no sabías es que la depilación en lugares especializados y realizada por un profesional ¡no duele tanto! y sobre todo, cuidarán tu piel mejor que nadie.
Agéndate
Aunque a algunas la depilación puede tomarnos por sorpresa (clásica invitación a última hora para salir de puente), otras optan por una depilación constante. Por eso es importante que tengas en cuenta los días que duele más. ¿"Acaso cuando no duele", te preguntas? (de acuerdo, antes de leer esto piensas que es imposible no sufrir) pero por lo general los días después de tener la regla la depilación duele mucho más. Así que ya sabes, basta planificar tu paso por el centro de estética acorde a tu ciclo menstrual.
Y por favor, ¡no te afeites entre cera y cera! No importa lo tentada que estés a hacerlo, lo mejor es ir cada cuatro o cinco semanas pues la afeitada puede trastocar tu depilación y evitar que obtengas los mejores resultados. Además, ten en cuenta que un afeitado desigual puede dejar como ‘rastrojos’ después de depilarte, ya que algunos pelos serán muy cortos para arrancarlos. Resumiendo: no vale la pena. ¡Palabra de experta!
Hidratate
Seguramente en otro contexto, pero lo decimos siempre, ¡toma agua! Pues sí, no nos cansaremos de repetirlo, beber agua no hace más que beneficiarnos- y a la hora de depilarnos también-. Una piel hidratada por dentro y por fuera es clave para reducir el dolor ya que hace que la extracción del pelo sea más fácil y por ende, sí, vas a sufrir menos.
Deja el "Happy Hour" para después
Claro, unas copitas de coraje líquido pueden ser necesarias. ¡Pero es un gran error! Si eres de las que cree que tomar una copa antes de la depilación lo hará más fácil debes saber que estás provocando el efecto contrario. El alcohol hace que fluya más sangre haciendo que tu piel esté más sensible y puede tensar los poros. Por eso es que te sale un grito con cada tira que jalan.
El pre es tan importante como el post
¿Que tal si en vez de sufrir y pasar la noche en vela en anticipación a la depilación mejor dedicas ese tiempo para exfoliar tu piel? Así te aseguras de llegar a tu cita con la piel preparada sin rastros de células muertas ni pelos enterrados. ¡Será más rápida y menos dolorosa! Descubre todos los tips de cuidado post-cita para garantizar una depilación de bikini perfecta.
Cera natural 1 - Cera artificial 0
Si no te has detenido a pensar en el tipo de cera que utilizan en tu centro de estética es hora de que lo hagas. Las ceras sintéticas son más duras y a veces son hasta difíciles de eliminar de nuestra piel con agua caliente y jabón, ¡imaginate cuando es arrancada de tu piel! Pero entre el dolor y el sufrimiento quién tiene tiempo para pensar en eso. Por eso, ahora con la cabeza fría, antes de que tu especialista se ponga a trabajar pregúntale sobre la cera que va a usar. Opta siempre por una depilación con cera natural pues podrías evitarte unas cuantas lágrimas.
No te vamos a engañar, la depilación (sobre todo en partes más íntimas) es incómoda, dolorosa y en general un proceso odioso pero si sigues estos consejos notarás la diferencia.