Sicología
Los 7 tipos de mujeres, según su personalidad
Fucsia.co, 31/10/2013
¿Impulsiva o calmada?, ¿sociable o solitaria?, reconocer si una mujer es inteligente emocionalmente no es tan difícil como parece; o bien, así lo asegura Augusto Cury, autor de 'Mujeres inteligentes, relaciones saludables'.
Aunque una mujer parezca aparentemente libre - por fuera- , puede ser esclava de sí misma - por dentro-. Sobre este precepto, el Escritor y Psicólogo clasifica la mente femenina, de acuerdo al tipo de personalidad que tiene la mujer.
Según él, cada tipo tiene ventajas y desventajas, unas más que otras, pero la idea es que se aprenda a no elegir siempre la "ley del mínimo esfuerzo" para abordar situaciones de crisis en su vida, sino que, al contrario, se tome una actitud que destruya los pensamientos, sentimientos y reacciones negativas, dando paso a la manifestación de un yo que no esté bajo el dominio de las emociones. ¿El resultado? relaciones constructivas, estables y satisfactorias, consigo misma y con quienes le rodean.
Analíticas: Son reflexivas frente a los comportamientos de los demás y asimismo, piensan antes de reaccionar, por lo que no dan respuestas inmediatas. Saben esperar y no se impacientan ante los resultados no inmediatos, pero aún así planean el futuro. Son autosuficientes e intelectualmente brillantes.
Sin embargo, al ser muy analíticas tienden a ser serias, además de tener poca tolerancia con gente que no tiene su mismo nivel intelectual, por lo que pueden tener conflictos en su aspecto sentimental.
Observadoras: son muy buenas captando con exactitud lo que sucede a su alrededor. Son multitareas. Entre sus ventajas están su creatividad e imaginación, de las que se deriva su facilidad para construir nuevas ideas. No obstante, este tipo de mente tiende a divagar en los detalles que nos son realmente importantes, por lo que tienden a sentirse ofendidas con facilidad.
Contemplativas: son completamente sensoriales y siempre ven lo que está detrás de lo obvio, además de ser emocionalmente tranquilas e intelectualmente profundas.
Definitivamente, uno de sus puntos a favor es que enfrentan con dignidad sus dificultades, pero al ser contemplativas en exceso pueden ensimismarse en un mundo de pensamientos creado por ellas y desviarse de la realidad.
Mujeres “concha”: son introvertidas y tímidas. Tienen problemas para comunicar sus ideas y más aún expresar sus sentimientos. Se caracterizan por su discreción. No se sienten cómodas con nuevas personas y mucho menos siendo el centro de atención; por esta razón, las situaciones emocionales fuertes generan un alto impacto en ellas. En el campo sentimental, este tipo de mujeres tienden a cerrarse en torno a su pareja y dejar de lado a su familia y a su escaso grupo de amigos.
Mujeres stop-shop: son amantes del “tener”. Su mejor amiga es la tarjeta de crédito y los bolsos, ropa, zapatos y decoración son su delirio. Son definitivamente consumistas, aunque no todas pueden ser catalogadas como compradoras compulsivas.
Pero no todo es malo en su personalidad, pues así como les encanta comprar para ellas, adoran hacer regalos a sus seres queridos, además de ser consideradas muy alegres y agradables. Son excelentes anfitrionas y su nivel de sociabilidad es alto, por lo que siempre están rodeadas de personas que las quieren.
No obstante, su pasión por el “tener” las hace ser esclavas de satisfacer sus necesidades no necesarias, tanto así que la experiencia de comprar se convierte en su obsesión y su placer. Se debaten, entonces, en medio de un circulo vicioso de ansiedad-posesión- placer – culpa, por lo que necesitan modificar su yo hacia un plano menos material.
Impulsivas: ellas no piensan mucho antes de hablar, pues la mayoría de sus reacciones son instintivas basadas en el principio de acción- reacción. Dicen, con gran alarde, que dicen lo que piensan, pero esto, antes de ser reflejo de su madurez, habla de sus falta de autocontrol.
Uno de los aspectos positivos de este tipo de mentes es que siguen sus metas hasta el final,pero son capacaes de pasar por encima de quien sea necesario para hacerlo.
Ellas deben aprender a lidiar con su personalidad para construir relaciones largas y saludables , pues debido a cómo son tienden a herir con facilidad. Además, deben cultivar su tolerancia ante las frustraciones.
Autónomas: son transparentes con todas las personas y en cualquier situación. No disfrazan lo que sienten y son abiertas a expresarse de sus crisis y dificultades, e incluso llorar cuando lo necesitan. Esto las hace sentirse seguras de sí mismas y a irradiarlo a los demás, lo que, además les hace ganar autonomía. Ellas definitivamente prefieren la naturalidad, por lo que no son muy adeptas a someterse a procedimientos estéticos; es decir, prefieren cultivar su belleza interior como reflejo de la exterior.
No obstante, por el hecho de ser tan transparentes, pueden decir palabras inapropiadas en momentos inoportunos.
En cada uno de los tipos de mente, Cury recomienda no dejarse llevar por el momento, pensar antes de hablar y actuar y, en situaciones de alto impacto emocional, abrir las ventanas mentales de la cordura, la paciencia y la tolerancia y cerrar por completo las de la rabia, el odio y la impaciencia. “El dolor sufrido abate a algunas mujeres, pero las mujeres inteligentes crecen con él” , dice.
Según él, cada tipo tiene ventajas y desventajas, unas más que otras, pero la idea es que se aprenda a no elegir siempre la "ley del mínimo esfuerzo" para abordar situaciones de crisis en su vida, sino que, al contrario, se tome una actitud que destruya los pensamientos, sentimientos y reacciones negativas, dando paso a la manifestación de un yo que no esté bajo el dominio de las emociones. ¿El resultado? relaciones constructivas, estables y satisfactorias, consigo misma y con quienes le rodean.
Analíticas: Son reflexivas frente a los comportamientos de los demás y asimismo, piensan antes de reaccionar, por lo que no dan respuestas inmediatas. Saben esperar y no se impacientan ante los resultados no inmediatos, pero aún así planean el futuro. Son autosuficientes e intelectualmente brillantes.
Sin embargo, al ser muy analíticas tienden a ser serias, además de tener poca tolerancia con gente que no tiene su mismo nivel intelectual, por lo que pueden tener conflictos en su aspecto sentimental.
Observadoras: son muy buenas captando con exactitud lo que sucede a su alrededor. Son multitareas. Entre sus ventajas están su creatividad e imaginación, de las que se deriva su facilidad para construir nuevas ideas. No obstante, este tipo de mente tiende a divagar en los detalles que nos son realmente importantes, por lo que tienden a sentirse ofendidas con facilidad.
Contemplativas: son completamente sensoriales y siempre ven lo que está detrás de lo obvio, además de ser emocionalmente tranquilas e intelectualmente profundas.
Definitivamente, uno de sus puntos a favor es que enfrentan con dignidad sus dificultades, pero al ser contemplativas en exceso pueden ensimismarse en un mundo de pensamientos creado por ellas y desviarse de la realidad.
Mujeres “concha”: son introvertidas y tímidas. Tienen problemas para comunicar sus ideas y más aún expresar sus sentimientos. Se caracterizan por su discreción. No se sienten cómodas con nuevas personas y mucho menos siendo el centro de atención; por esta razón, las situaciones emocionales fuertes generan un alto impacto en ellas. En el campo sentimental, este tipo de mujeres tienden a cerrarse en torno a su pareja y dejar de lado a su familia y a su escaso grupo de amigos.
Mujeres stop-shop: son amantes del “tener”. Su mejor amiga es la tarjeta de crédito y los bolsos, ropa, zapatos y decoración son su delirio. Son definitivamente consumistas, aunque no todas pueden ser catalogadas como compradoras compulsivas.
Pero no todo es malo en su personalidad, pues así como les encanta comprar para ellas, adoran hacer regalos a sus seres queridos, además de ser consideradas muy alegres y agradables. Son excelentes anfitrionas y su nivel de sociabilidad es alto, por lo que siempre están rodeadas de personas que las quieren.
No obstante, su pasión por el “tener” las hace ser esclavas de satisfacer sus necesidades no necesarias, tanto así que la experiencia de comprar se convierte en su obsesión y su placer. Se debaten, entonces, en medio de un circulo vicioso de ansiedad-posesión- placer – culpa, por lo que necesitan modificar su yo hacia un plano menos material.
Impulsivas: ellas no piensan mucho antes de hablar, pues la mayoría de sus reacciones son instintivas basadas en el principio de acción- reacción. Dicen, con gran alarde, que dicen lo que piensan, pero esto, antes de ser reflejo de su madurez, habla de sus falta de autocontrol.
Uno de los aspectos positivos de este tipo de mentes es que siguen sus metas hasta el final,pero son capacaes de pasar por encima de quien sea necesario para hacerlo.
Ellas deben aprender a lidiar con su personalidad para construir relaciones largas y saludables , pues debido a cómo son tienden a herir con facilidad. Además, deben cultivar su tolerancia ante las frustraciones.
Autónomas: son transparentes con todas las personas y en cualquier situación. No disfrazan lo que sienten y son abiertas a expresarse de sus crisis y dificultades, e incluso llorar cuando lo necesitan. Esto las hace sentirse seguras de sí mismas y a irradiarlo a los demás, lo que, además les hace ganar autonomía. Ellas definitivamente prefieren la naturalidad, por lo que no son muy adeptas a someterse a procedimientos estéticos; es decir, prefieren cultivar su belleza interior como reflejo de la exterior.
No obstante, por el hecho de ser tan transparentes, pueden decir palabras inapropiadas en momentos inoportunos.
En cada uno de los tipos de mente, Cury recomienda no dejarse llevar por el momento, pensar antes de hablar y actuar y, en situaciones de alto impacto emocional, abrir las ventanas mentales de la cordura, la paciencia y la tolerancia y cerrar por completo las de la rabia, el odio y la impaciencia. “El dolor sufrido abate a algunas mujeres, pero las mujeres inteligentes crecen con él” , dice.