¿"Un clavo saca otro clavo"? Averigua si estás siendo el "martillo" o el "clavo".
Tal vez nada duela más que un corazón roto. Y a veces, lo único que puede ayudar a sanarlo es un rebound, o una relación de rebote, para llenar el hueco que dejó tu ex- o el que ella dejó en él. Si un “clavo saca otro clavo” tienes que tener cuidado de no ser ni el “clavo” ni el “martillo”, pues puedes terminar rompiendo más corazones. Descubre a continuación las señales que indican si eres alguna de las dos.
Poco tiempo después de terminar comenzaste a salir con un chico nuevo, y aunque no tengas malas intenciones (al contrario, lo haces para sentirte mejor) no puedes evitar herirlo. Por eso siempre es mejor decirle a tu nuevo amante que todavía no estás preparada para una relación seria. Así le ayudarás a tomar las cosas con calma, sin demasiadas expectativas y con el corazón protegido. ¿No estás segura? Estos son los claros indicios que eres el “martillo”.
Quieres salir con alguien, con quien sea, de verdad: c-u-a-l-q-u-i-e-r-a
Lo único que quieres es una pareja para arruncharte los domingos, ¡da igual quien sea! Usualmente tras haber sido abandonada o después de la ruptura de lo que fue una mala relación, lo único que quieres es un poco de atención y cariño. Inconscientemente tu cerebro busca con quien experimentar las sensaciones del amor, incluso cuando dijiste “ahora sí voy a estar sola un buen tiempo”.
No lo conoces más allá del borde de la cama
Seguramente tienes una relación sexual genial, pero no tienes idea de cómo va la relación fuera de la cama. Te has estado divirtiendo demasiado entre sus brazos como para salir y averiguarlo. Por ahora prefieres centrarte en lo divertido de tu nuevo romance más que en lo serio. Te interesará leer más sobre este tipo de relaciones “adultescentes”.
No recuerdas cómo superaste a tu ex
Superar a alguien que realmente amaste toma tiempo, para algunos más que otros. Así que aunque sientas que estás feliz intenta recordar el proceso que viviste para olvidar a tu ex. ¿No puedes? La respuesta está en que tal vez nunca lo tuviste. Y aunque quisieras barrerlo bajo el tapete como hacen en las caricaturas, eventualmente volverá a salir.
No puedes dejar de hablar de él, ni siquiera con tu nuevo chico
No trates de convencerte que lo haces por ser honesta, la verdad es que lo mencionas a todo quien esté dispuesto a escucharte. Seguramente este es el momento en que tu chico te enfrentará pues son las situaciones ideales para el “tenemos que hablar, ¿tú y tu ex qué?”.
Tienes cambios de humor
La confusión que tienes en el corazón saldrá a la luz cada vez que estés sola, por eso prefieres estar con él o rodeada de amigos todo el tiempo. Podrás correr pero no te puedes esconder.
Fantaseas con tu ex
Más allá de los sueños sexuales que no significan nada, si fantaseas con escenarios que involucran a tu ex, o te gusta imaginarte cómo sería si te encuentras con él y tú estás en compañía de tu nuevo chico, aunque trates de convencerte que lo has superado, que aún ocupe tantos de tus pensamientos indica lo contrario.
Si crees que tu ex sigue enamorado de ti podrías estar muy equivocada.
Te apresuras
Cuando descubres que te estás enamorando, lo normal es asustarse, tener miedo de volver a exponerse a un corazón roto, te mueves con cautela. Sin embargo, si algo caracteriza a las relaciones de rebote es la prisa.
¿Reconoces todas estas señales, pero no en tí sino en él? Descubre si eres el “clavo”.
Terminó hace poco
Esta señal puede parecer muy obvia, sin embargo es el primer error que solemos cometer. Y es que no todos los chicos que terminan una relación estable están buscando su próxima novia que le cure el corazón roto. Hay algunos que no logran recuperarse tan rápido y aún no están preparados para amar otra vez.
La ruptura fue una pesadilla
Después de una relación de muchos años, del tipo que todos pensaban que se iban a casar, o fue tan conflictiva que terminaron muy mal, tienes que saber que no se superará tan rápido.
Van a toda máquina y a paso de tortuga a la vez
Superficialmente la relación da pasos de gigante, ya se “aman” desde la segunda cita, quieren vivir juntos, ¡son el uno para el otro! Calma y control. Lo conoces hace una semana, tal vez sea un cuento de hadas pero también puede que sea puro cuento. Fíjate si en lo que es realmente importante, la conexión, han avanzado muy poco y sabrás la verdad.
Su interés en ti cambia repentinamente
Un día no puede soltarte ni para respirar y al otro ni se acuerda que existes. Esta es una clara señal de que su corazón está confundido, no sabe que quiere ni que necesita, y tú has quedado atrapada en el medio.
¿Ves claras las señales? Tienes dos opciones: tratar de hacerlo funcionar o salir corriendo. Tomes la decisión que tomes ten a la mano estos remedios para el desamor.