La soltería es una opción vital para muchos e igual de respetable que aquella que tiene como base el matrimonio o la vida en pareja.
Existen numerosos estudios que se adentran en las ventajas de estar casado o inmerso en una relación seria. Pero la ciencia también ha demostrado que estar soltero tiene sus beneficios. Estos son algunos de ellos.
1. Se ejercitan más
Los solteros dedican más tiempo a mantenerse en forma y a practicar algún deporte que aquellos que se mantienen en pareja, los casados o los divorciados. Así lo indica un estudio realizado en Estados Unidos por el Departamento de Estadísticas a nivel nacional sobre una muestra de más de 13.000 personas con edades comprendidas entre los 18 y los 64 años.
Según un estudio realizado por la Universidad de Texas en Austin, Estados Unidos, a 1,2 millones de norteamericanos en el marco de la Encuesta Nacional de Salud (National Health Interview Survey) entre los años 1972 y 2003 y publicado en 2008, las personas que nunca habían contraído matrimonio gozaban de un mayor bienestar y salud.
Sin embargo, otra investigación, elaborada en 2006 por los expertos Zhenmei Zhang y Mark D. Hayward bajo el nombre ‘Gender, the Marital Life Course, and Cardiovascular Disease in Late Midlife‘, publicado en la prestigiosa revista Journal of Marriage and Family, concluyó que las solteras y las divorciadas tienen más riesgo de no vencer enfermedades relacionadas con el corazón y los vasos sanguíneos, una vez superan sus 50 años. En cuanto a los hombres, no se evidenció una relación entre el riesgo de padecer este tipo de dolencias y la soltería o la disolución del matrimonio. Para llegar a estas conclusiones, se tomó una muestra de más de 9.000 adultos a los que se hizo seguimiento durante ocho años.
Existen diferentes estudios que relacionan estar en una relación duradera con el sedentarismo y, por lo tanto, la ganancia de kilos. Uno de ellos lo realizó la Southern Methodist Univeristy of Dallas (Estados Unidos) y lo publicó la revista Health Psychology. Tras examinar a 160 parejas de recién casados durante sus cuatro primeros años de matrimonio, las investigaciones reflejaron que el 60% de estas había engordado.
El motivo principal que dieron los investigadores, liderados por Andrea Meltzer, es que en un matrimonio feliz, la preocupación por atraer al otro desaparece.
De acuerdo con otra investigación reciente, esta vez realizada por expertos de la universidad australiana de Queensland y publicada en The American Jounal of Preventive Medicine sobre una muestra de más de 6.000 mujeres, estas engordan un promedio de casi siete kilos a los diez años de estar inmersas en un matrimonio o con pareja estable, lo que no ocurre cuando están solteras. Si a la ecuación se le añade la llegada de un bebé, los kilos de más se cifran en 10.
4. Tienen más facilidades para encontrar trabajo
Según una investigación realizada por la Universidad de Chicago, los solteros lo tienen más fácil a la hora de encontrar un puesto de trabajo que aquellas personas que están casadas.
Los resultados del estudio evidenciaron que de los seis millones de despidos que se materializaron en Estados Unidos tras la crisis de 2009, solo un 22% de estos puestos fueron ocupados por casados (algo más de un millón de personas), mientras que la fuerza laboral ‘soltera’ se cifró en más de cuatro millones.
5. Más sociables
Las personas solteras tienen mayor capacidad de mantener a sus amigos en el tiempo, aumentar su red social y ver a sus amistades y familiares de forma más frecuentes que aquellas que han consolidado una relación o están casadas. Así lo reveló un estudio liderado por el doctor Kelly Musick, profesor de la Facultad de Ecología Humana de la Universidad Cornell de Nueva York, en el marco de la Encuesta Nacional de Salud de las Familias y los Hogares estadounidenses (National Survey of Families and Households), realizado sobre un total de 2.737 personas, entre hombres y mujeres.
Un estudio realizado por la organización The Better Sleep Council sobre una muestra de 542 personas evidenció que las personas que no tienen una relación estable y, por lo tanto, no duermen acompañados como costumbre, concilian mejor el sueño que aquellas que cada noche se acuestan con su pareja. De hecho, el 63% de las personas encuestadas que mantenían una relación reconoció que tiende a dormir lo más distanciado de su compañero cuando comparten la cama por la incapacidad de conciliar el sueño debido a los movimientos del otro, a sus ruidos, ronquidos, etc. El 26% de estos, admitió a su vez que duermen mejor solos que cuando lo hacen en compañía.
7. Mayor independencia económica
Los solteros no tienen que dar explicaciones sobre a dónde van a parar sus ahorros y pueden darse un mayor número de caprichos sin tener que contar con la aprobación de nadie. De hecho, según el estudio
‘The Role of Money Arguments in Marriage’ realizado sobre 1.700 mujeres entre 1988 y 2006 y publicado en la revista J
ournal of Family and Economic Issues, reveló que la mayor fuente de insatisfacción de su matrimonio era por los desacuerdos que se generaban con la pareja por cuestiones de finanzas. Al finalizar las investigaciones, 966 de ellas se habían divorciado de su pareja y todas coincidieron en afirmar que las discusiones económicas habían hecho mella en su relación.
Otra investigación hecha en conjunción por la revista
Forbes y The National Endowment for Financial Education (NEFE) reveló que el 80% de las parejas oculta al otro miembro de la misma cuestiones relacionadas con la economía personal o del hogar.
Mientras que ellas son más propensas a esconder las facturas y las compras de valores considerables, ellos ocultan las cifras de sus ingresos y mienten sobre sus deudas y cuentas bancarias.
Los solteros que se mantienen en ese estado durante los años y, finalmente, deciden establecerse y darse al matrimonio son más proclives a mantener ese estado civil en el tiempo. Es decir, se divorcian menos. Así lo indica un sondeo realizado por una de las agencias federales de Estados Unidos especializada en estadística, el Bureau of Labor Statistics.
El porqué radica en que son más selectivos con sus potenciales parejas y más conscientes de lo que implica el matrimonio, tras años de haber vivido sin compromiso y sin dar explicaciones a una pareja.
9. Lidian mejor con la soledad y con las rupturas.
Los solteros que están conformes con su situación, es decir, aquellos que no permiten que las imposiciones sociales les afecten, saben sacar mejor provecho de los momentos de soledad y no verlo como una traba.
También tienen mayor capacidad de afrontar las rupturas con sus potenciales parejas a través de su implementada autosuficiencia y capacidad de superar la adversidad. A esa conclusión llegó un estudio realizado por la sicóloga Bella DePaulo tras encuestar a las de 1.200 personas.
10. Se preocupan más por el disfrute sexual del otro
De acuerdo con una investigación realizada por el portal de citas web
Match.com a 6.000 personas, entre solteros y casados,
el 97% de los encuestados que reconocieron no tener pareja estable aseguraron que, en lo que se refiere al disfrute, prefieren satisfacer primero a su compañero de cama durante el
sexo que imponer su propia satisfacción. El dato de los casados fue poco significativo, según el propio portal, por lo que se abstuvo de incluirlo.