Médicos resaltan que una de las más recientes fotos de la monarca demuestra que no estaba bien de salud.
El estado de salud de la reina Isabel II preocupa al mundo. Los médicos de la monarca británica se mostraron angustiados por la actual situación de la mujer de 96 años, de acuerdo con el Palacio de Buckingham.
“Después de una evaluación adicional esta mañana, los médicos de la reina están preocupados por la salud de Su Majestad y han recomendado que permanezca bajo supervisión médica”, establece el comunicado oficial. Asimismo, añade que la soberana permanece tranquila en el castillo de Balmoral.
Los miembros de la familia real del Reino Unido se desplazan con celeridad hasta Escocia, donde está la reina, luego de conocer su estado de salud. Incluso, el portavoz del príncipe Harry le aseguró a CNN que tanto él como su esposa Meghan viajarán hasta allí. Además, se dice que el príncipe Carlos, el heredero al trono, ya está con su madre.
La noticia sobre el estado de salud de la reina Isabel II le está dando la vuelta al mundo, por lo que se han estado conociendo diferentes detalles que insinuaría que la monarca no estaba pasando por un buen momento con su salud.
Hace poco la mujer de 96 años recibió la visita de la nueva primera ministra del Reino Unido, Elizabeth Truss, y las fotos de su reunión han dado de qué hablar en las últimas horas. Y es que de acuerdo con unos médicos que hablaron con Julio Sánchez, periodista de la W Radio, hay unos evidentes signos de alerta.
Los profesionales contaron que en las imágenes se ve un color oscuro en las manos de la monarca, lo que evidenciaría que “están absolutamente colapsadas de sangre”, lo cual consideran gravísimo, pues se podría tratar de problemas críticos de circulación.
Algo que también vale la pena resaltar es que se rompió con la tradición de que la reina se encontrara con la nueva primera ministra en el Palacio de Buckingham en Londres, y es que por cuestiones de movilidad, Truss tuvo que visitar a la monarca en el Castillo de Balmoral en Escocia. Por lo que queda en evidencia que la monarca definitivamente no está pasando por un buen momento de salud.
Hasta el momento, no se tiene más información oficial sobre el estado actual de salud de Su Majestad.