Ha causado revuelo la imagen del presentador antes de ser famoso.
Con el paso de los años, Carlos Vargas ha logrado ser reconocido como una de los presentadores más populares de la televisión colombiana. El famoso comunicador se ha enfocado en el ámbito del entretenimiento y allí ha encontrado una de sus más grandes pasiones en el campo laboral.
Aunque Vargas ha decidido no revelar muchos detalles de su vida privada sino que sus redes sociales están impregnadas con posts de su trabajo y algunos de sus viajes, lo cierto es que poco a poco se van revelando algunos aspectos de Carlos desconocidos para muchos se sus seguidores.
En la actualidad, Carlos Vargas es uno de los presentadores principales del programa de chismes “La Red” del Canal Caracol. En una de las emisiones del show, el elenco pidió que cada uno de ellos mostrara la foto de su cédula. Así lo hizo Mary Méndez, Carlos Giraldo y Frank Solano, pero la foto que más sorprendió fue la de Carlos.
En la pantalla grande del set de grabación, apareció la imagen ampliada de la cédula de Vargas y la foto generó más de una risa y comentarios irónicos. En el documento se ve al presentador cuando era un adolescente, además se ve que tiene bastante cabello y bigote.
Al respecto, Vargas dijo que las dos versiones de él, con cabello y sin él, le gustaban por igual: “Los dos me gustan porque soy yo mismo. En esa época tenía un bigote espectacular”.
La burlas no se detuvieron y Solano le dijo que le preocupaba esa imagen porque parecía un delincuente “De solo verte en la cédula se me perdieron 100 mil de la billetera”.
Ante el divertido comentario, Vargas no dudó en responder y explicó la razón de por qué tenía dicho look en su adolescencia: “Cuando usted es gay toca buscar en la adolescencia cara de hampón pa’ que no se metan con uno”.
Hace poco, Carlos Vargas dividió opiniones por una declaración respecto a los hombres que, por él ser un miembro de la farándula nacional, lo buscan como pareja sentimental por su dinero:
“Esto que les voy a contar lo hago para desahogarme y estoy seguro que es más concurrido de lo habitual. Yo le coqueteo a manes de frente por redes y me ven como su PSE (plataforma de pagos en línea), me piden plata prestada o regalada, o si no me dicen que me mandan contenido sexual a cambio de dinero (...) Pero algo que si tengo claro es que no soy ‘marrano’ de nadie, el auto amor y auto estima ha sido mi objetivo desde niño”.