La caleña no ha podido recuperarse del todo por sus biopolímeros.
La Segura es una de las influenciadoras colombianas con más seguidores en sus redes sociales, por su contenido de viajes, comedia, bailes y blogs ha logrado crear una gran comunidad de 8.5 personas en su cuenta de Instagram.
Sin embargo, este último año a nivel de salud, no ha sido nada fácil para la caleña por unos biopolímeros que le inyectaron en sus glúteos hace varios años.
A finales del 2022, por medio de una dinámica de preguntas en su cuenta de Instagram, uno de sus internautas le preguntó sobre la evolución y recuperación desde la última vez que le extrajeron la sustancia que estaba afectando su cuerpo drásticamente.
“Sí, mi bebé, yo me tengo que someter a una cirugía de reconstrucción de cicatriz, y también de reconstrucción de glúteos con grasita, que fue lo que el médico cirujano que me retiró los biopolímeros me dijo, que ya se cumplió el tiempo que eran ocho meses”, respondió la Segura.
Sin embargo, a partir de ese momento ha tenido múltiples complicaciones de salud que hasta el día de hoy no le han permitido retomar su vida “normal” de antes.
Es importante resaltar que, de acuerdo con todos los especialistas, con el tiempo la sustancia de los biopolímeros se empieza a encapsular, por lo que desde ese punto ya es imposible retirarlos en un 100 %, es decir que la mujer u hombre que los posea ya deberá sufrir las consecuencias de por vida.
“Escúchenme a mí que he pasado por un infierno gracias a los biopolímeros. Vean, aprendan del infierno que hemos pasado Jéssica Cediel, Marcela Reyes, Lina Tejeiro”, dijo recientemente por medio de su cuenta de Instagram.
Por lo anterior, la caleña confesó que ha tenido que estar constantemente en exámenes médicos y que precisamente en este momento se encuentra en Bogotá.
“El 50 % de mi vida he estado en citas médicas con cirujanos, especialistas, buscando más y más respuestas (…) Hoy voy para una cita médica con un cirujano de Bogotá, ya tuve unos exámenes que los tengo aquí. Nunca me los habían mandado y esta radiografía, TAC, o como se llame muestra los biopolímeros rosados. Viendo yo esto, entiendo mucho todo, entiendo del fucki… dolor de mier…”, confesó.
“Siento que el man me va a decir que me tienen que intervenir otra vez, pero me da mucho miedo porque me dicen que con las otras resonancias que me hicieron, yo lo tengo muy adentro del músculo, donde hay una terminación nerviosa y allá no puede entrar ningún cirujano. Ellos llegan a un punto, Ya saben que mi dolor es en el glúteo mayor y eso está podrido de biopolímeros (…) Voy para donde el médico, deséenme suerte (…) Nada, seguimos en la lucha con eso. Gracias a Dios estoy bien y estoy con una calidad que ahí vamos, bien”, expresó.
No obstante, aseguró que nuevamente tienen que hacerle otra extracción de biopolímeros y que, además, deben hacerle una resonancia profunda.
“Sí me tienen que operar otra vez, me tienen que hacer otra cirugía de extracción de biopolímeros. Esa resonancia, ustedes me han dicho ‘¿no te han hecho muchas resonancias?’ Sí, pero eso no se llama resonancia, sino un TAC, ese marcó el biopolímero rosado como lo vieron (…) Donde se ve el producto rosado es donde me duele, la conclusión es que me tienen que volver a operar de nuevo”, concluyó.