La actriz reveló detalles de lo que es su relación actual con el protagonista de ‘Vecinos’.
Adriana Arango es una de las caras más reconocidas de la telenovela de RCN ‘Ana de nadie’. Ella interpreta el papel de Violeta, una de las mejores amigas de la protagonista. Su personaje ha sido uno de los más queridos de los televidentes porque representa a esa amiga que aunque está un poco madura es consciente de que la edad es solo un número y vive su sexualidad a plenitud.
Para muchos todavía está presente uno de los episodios más duros que vivió Adriana Arango en su vida real. Se trata de la infidelidad que sufrió por parte del actor Robinson Díaz. La actriz se sinceró con Violeta Bergonzi para el programa ‘Buen día, Colombia’ en la sección ‘Venga le cuento’.
Adriana y Robinson contrajeron matrimonio en 1993. Vivieron un idilio de amor y parecían ser una de las parejas más estables de la farándula colombiana o por lo menos eso era lo que pensaban sus fans. Pero en el 2009 se dio a conocer una noticia que cambiaría por completo esta “historia de amor”.
El actor le fue infiel a Adriana con Sara Corrales mientras los dos trabajaban en la telenovela del canal Caracol ‘Vecinos’.
Esta fue noticia en todos los medios de comunicación de entretenimiento en el país. Esto desencadenó una crisis matrimonial que años después fue “superada” pues los dos decidieron darse una nueva oportunidad en el amor. En el 2016 fueron portada de revistas con esta historia. Pero todo parece indicar que ya las cosas no están como en ese tiempo cuando se dieron la nueva oportunidad.
De acuerdo con la actriz, la relación que sostiene ahora con Robinson Díaz es más de amistad. En medio de la conversación que tuvo con la presentadora del matutino de RCN se sinceró y no se calló nada. Lo que dijo fue revelador porque algunos todavía tenían en su cabeza que Robinson y ella estaban juntos como pareja.
Bergonzi le picó la lengua a la actriz que intrepreta a Violeta en ‘Ana de nadie’ y le habló sobre las inseguridades que pueden llegar a sentir las mujeres cuando son “reemplazadas por otras”. Fue entonces cuando la actriz le confesó que lo que vivió cuando Robinson Díaz le puso los cachos fue terrible.
“En mi caso, cuando me pasó, que fue tan terrible (...) Yo creo que yo si nací con una autoestima muy parada, y por un hombre jamás, jamás debemos competir”, dijo de entrada la actriz, pero la presentadora “contrapreguntó” y fue cuando le dijo, sin pelos en la lengua, si ella se había llegado a comparar con la mujer que ese momento tenía el corazón de su esposo.
Y como era de esperarse reconoció que sí llegó a compararse con Sara Corrales. “Yo cómo me voy a comparar con una persona 15 años menor que yo, o sea, da risa la comparación. Además, qué vamos a comparar, yo tenía una vida completa con ese esposo”, dijo.
Una de las preguntas que no pudo faltar y recordando la famosa reconciliación es la de sí ella fue capaz de perdonar a Robinson por lo que le dijo a lo que aseguró que eso era “irreparable”. Dijo que con el tiempo llegaron a ser como amiesposos. “Alguien que yo quiero, que es mi esposo o fue mi esposo o lo que sea y que hacemos cosas juntos a veces porque pues uno queda siendo familia y tal, pero como pareja, como intimidad, eso no se puede reparar.