La presentadora confesó que no siempre se sintió cómoda por ser tan alta.
Carolina Cruz es una de las presentadoras más conocidas de la farándula nacional. La nacida en Tuluá tiene una gran comunidad de seguidores en las redes sociales, pues supera los siete millones. Cada una de sus publicaciones suele llenarse de miles de ‘me gusta’ y cientos de comentarios.
Allí la también modelo suele compartir mucho contenido de su día a día, por lo que es normal ver fotos, videos e historias tanto de su vida laboral como de su vida privada. Y es que su belleza y personalidad la han llevado a ganarse el cariño de una gran cantidad de televidentes, motivo por el que están pendientes de su cotidianidad.
Hace poco la presentadora estuvo en una entrevista con ‘Los Informantes’ de Caracol Televisión, allí habló sobre diferentes temas personales, como: su separación de Lincoln Palomeque, la salud de su hijo Salvador y algunas de las situaciones difíciles que ha tenido a lo largo de su vida.
La vallecaucana confesó que en su adolescencia se sentía un poco mal por su altura, pues siempre fue de las mujeres más altas de su colegio, por lo que tenía que estar en los puestos de atrás del salón y era la última en la fila por orden de estatura. Aseguró que no se sentía mal con su cuerpo, pero ser tan grande no le parecía “tan chévere”.
Asimismo, dijo que por esta misma razón nunca estuvo entre sus sueños competir en certámenes de belleza o ser modelo, pues consideraba que ser tan alta era una desventaja. “Yo nunca soñé con ser reina ni modelar ni nada porque yo era muy alta”, manifestó. La mujer agregó que tenía los dientes torcidos y por esto tampoco lo veía posible.
Sin embargo, hoy en día piensa muy diferente y se siente cómoda con su estatura, pues no solo la llevó a ser reina sino que también modelo y presentadora de televisión. Y es que vale la pena resaltar que Carolina Cruz mide alrededor de 180 cm.
Por otro lado, la nacida en Tuluá aseguró que no haber sido elegida como Señorita Colombia cambió la forma en la que percibía la vida, “el no haber ganado como que me aterrizó, me hizo entender que no siempre tienes que ganar, no siempre tienes que ser la primera, no siempre tienes que brillar”, aseguró.