La empresaria estaba haciendo una obra social en el centro de Bogotá y vivió una peculiar situación. ¿Qué pasó?
Epa Colombia suele dar mucho de qué hablar debido a su polémica personalidad. La empresaria tiene muchos detractores por cosas que ha hecho en el pasado, por su comportamiento y por el tipo de contenido que sube a sus redes sociales, pues muchos no están de acuerdo con este.
Ella es consciente de esta situación; sin embargo, prefiere no prestarle mayor atención y, por el contrario, enfocarse en sus seguidores, y es que vale la pena resaltar que tiene más de cinco millones en Instagram. Asimismo, una de sus prioridades es su empresa de keratinas porque le ha cambiado radicalmente la vida.
Antes de volverse reconocida, Daneidy Barrera Rojas, su nombre de pila, vivía en condiciones de escasez, por lo que sabe lo difícil que es afrontar esta situación. Por tal motivo, recientemente estuvo en el centro de Bogotá haciendo una labor social, pues compartió con habitantes de la calle.
La creadora de contenido les llevó tamales y bebidas y ellos se mostraron muy agradecidos por este gesto. Además, también estaban emocionados de verla en vivo y en directo. Incluso, algunos estuvieron haciéndole un par de cumplidos, manifestando que se veía mucho más bella en la vida real.
Epa Colombia compartió algunos de los momentos que vivió en el barrio San Bernardo, también conocido como ‘Sanber’.Las imágenes cautivaron a más de un internauta, por lo que rápidamente se llenó de miles de ‘me gusta’ y cientos de comentarios en los que resaltaron la labor hecha por la empresaria.
“La pueden criticar por lo que quieran, pero no se puede negar el corazón que tiene, algo que ni los más adinerados harían”, “Podrá ser lo que sea según la critican pero tiene un corazón de humildad y de bondad”, “Eso fue un acto muy muy hermoso GRACIAS por hacerlo”, fueron algunos de los mensajes de felicitación y reconocimiento que le dejaron a Daneidy Barrera Rojas.
Por otra parte, hubo una situación en específico que dio de qué hablar y es que en un momento un habitante de la calle se le acerca a la creadora de contenido a pedirle una foto, ella acepta con mucho gusto; sin embargo, el hombre saca lo que parece un pegante y empieza a inhalarlo.
“Uy, no. Mi hermano, así no. Uy no, cucho... Era sin eso”, le dijo la mujer entre risas.