Su cicatriz es el reflejo de la dura etapa que tuvo que vivir con esta delicada enfermedad a la que, por fortuna, logró ganarle la batalla.
Esta es la historia de la modelo y presentadora estadounidense Elizabeth Brown Lax, a quien le cambió la vida de manera inesperada y repentina luego asistir al odontólogo en el año 2017 cumpliendo lo que se suponía era una visita rutinaria que, sin imaginarlo, terminó salvándola de la muerte.
Mientras le hacían el chequeo, el especialista que la atendía le expresó su preocupación porque le descubrió unos bultos extraños en la lengua, sin embargo, al principio no generó mayor alerta debido a que padece de liquen plano que, de acuerdo con el sitio Mayo Clinic, es “una afección de la piel que suele aparecer como bultos planos violáceos que causan picazón y que se desarrollan durante varias semanas”. Además, indica que “en la boca y la mucosa genital, el liquen plano forma manchas blancas reticuladas que a veces tienen llagas dolorosas”.
Sin embargo, las alarmas se encendieron cuando su odontólogo le manifestó que no le gustaba nada el aspecto de las protuberancias, por lo que decidió tomarle una muestra para analizarlas hasta que, finalmente, le informaron el insospechado diagnóstico de que estaba enfrentando un agresivo cáncer por el que debían quitarle la mitad de la lengua.
El resultado de los exámenes dio que se trataba de un carcinoma oral de células escamosas en etapa uno, un padecimiento que suele ser inofensivo, según reseñó Noticias Caracol. “Nadie puede prepararte completamente para que te digan que tienes cáncer. Durante aproximadamente una semana no pude comer, dormir ni concentrarme”, comentó la presentadora después de recibir el diagnóstico.
Aunque parecía que estaba a tiempo de librarse de las complicaciones que le podía causar este carcinoma oral, desafortunadamente un año después del diagnóstico inicial, Elizabeth comenzó a sentir un dolor “insoportable” en el odio que le daría indicios de una recaída a causa de un cáncer que ya se encontraba en etapa tres.
De acuerdo con versiones publicadas por el Daily Mail, para poder frenar los efectos de esta delicada enfermedad, la mujer de 45 años debió someterse a un procedimiento bastante complejo en el que los médicos le cortaron la mitad de la lengua y parte de la mandíbula, dejando grandes cicatrices en su rostro y cuello que hoy en día son el reflejo del duro proceso que tuvo que vivir. “Dijeron que necesitaba extirparme la mitad de la lengua y una mandibulectomía, reemplazando el hueso de mi mandíbula con hueso de mi pierna. También necesitaría una traqueotomía para poder respirar en el hospital y una sonda de alimentación”, explicó Brown.
Por otro lado, afirmó que aunque los cirujanos hicieron todo lo posible para no afectar la forma de su rostro, esto fue casi imposible, motivo por el que estuvo días sin mirarse al espejo. Además, señaló que tuvo que someterse a quimioterapia y aprender a volver a caminar a causa de la gran herida que le quedó en su pierna. “Nadie quiere mirarse en el espejo y ver tanto trauma físico, pero yo sabía lo afortunada que era de estar viva. Tuve que tomar un día a la vez”, precisó.
Y es que tras cumplir con los duros tratamientos que requería para batallar contra esta enfermedad, la modelo logró vencer el cáncer y ahora se desempeña como vicepresidenta de producción en Network Media, mientras a través de sus redes sociales muestra que se siente agradecida y emocionada por vivir un día a la vez disfrutando cada actividad que puede hacer desde comer hasta hablar, hacer ejercicio o cantar.