En su autobiografía la presentadora relata varias etapas de su vida antes de obtener la fama
Recientemente, la presentadora publicó su autobiografía Mi mundo, mis huellas. Allí, en donde abrió el corazón a los colombiano revelando partes de su vida que ni siquiera hubiéramos imaginado.
En su libro´la presentadora narra parte de esa vida que pocos conocen, esa etapa antes de ser reconocida por su belleza y talento, dejando ver varios datos curiosos sobre lo que ha tenido que vivir hasta llegar a esa cima de su carrera.
Entre las anécdotas que guarda este libro hay un capítulo que llama la atención y en el que la presentadora cuanta cómo fue ese primer amor en su vida y aunque no revela el nombre del implicado, si relata algunas de las experiencias que vivió con él en su momento.
En el libro habla de las experiencias dulces que vivió con el hombre, pero también hace referencia a otras que no lo fueron tanto y que inclusive le acarrearon pagos de deudas.
Al principio, según cuenta, era un romance “lindo y especial”, pero, con el pasar del tiempo se desmoronó por infidelidades, problemas con el alcohol y algunos episodios de violencia. “Estaba perdiendo mi tiempo con alguien que no me convenía y no me aportaba”, confesó Carolina en su libro.
Vivieron muchos problemas y en realidad el encanto de la relación se fue desmoronando y finalmente la presentadora le puso fin a esa relación. Sin embargo, como en toda relación que termina, siempre quedan esos sinsabores que no son tan fáciles de manejar.
“Esta relación me dejó muchas lágrimas, además de deudas y situaciones incómodas (...). Y aunque la verdad es que los ocho años y medio no fueron todos malos, y viví muchos momentos bonitos y especiales con él y su familia (que me querían mucho a mí y a mi familia)”, relató.
“Al final hizo tantas embarradas que toda la relación fue cambiando y en julio de 2002, cuando llegué de Cali a vivir a Bogotá, entendí que (…) lo mejor era que las cosas llegaran a su final”, añadió Carolina en su libro.
Y es que en el caso de Carolina no solo quedó el dolor de una ruptura, sino, que tuvo que pagar algunas deudas que no eran suyas., pues el novio de aquel entonces entró en una situación difícil y se fue a vivir a Estados Unidos con su mamá debiéndole plata a la hermosa caleña y con una deuda a su nombre en el Icetex.
“Al final hizo tantas embarradas que toda la relación fue cambiando y en julio de 2002, cuando llegué de Cali a vivir a Bogotá, entendí que (…) lo mejor era que las cosas llegaran a su final”, añadió Carolina en Mi mundo, mis huellas.
Así Carolina deja ver otra etapa de su vida y de nuevo da pie para muchos comentarios a su alrededor. Al parecer, la vida le está brindando nuevas y buenas oportunidades a la presentadora caleña tanto a nivel sentimental con su novio Jamil, como con la publicación de su biografía la cual seguramente traerá muchas cosas para comentar entre sus seguidores.