Prácticas para evitar la demencia

Tenía entre 10 a 12 años y me acuerdo muy bien el día que me dijeron que tenían que meter a mi bisabuela en un centro especializado porque estaba perdiendo la memoria y que tenía una enfermedad que se llamaba alzhéimer. Mi bisabuela jugó un rol muy importante en mi vida, ya que mis primeros 7 años los viví junto a ella y era una de las personas que yo más amaba.

Me acuerdo lo mucho que me afectó ver su proceso y cómo ya en sus últimos años no se acordaba de nada. Esta enfermedad nos llevó a experimentar mucha frustración como familia, ya que es muy doloroso ver a una persona que amas perder sus facultades, sus memorias, su ser. Recuerdo aún el dictamen de los médicos del porqué le había pasado esto; tenía que ver mucho con su manera de fumar, (amaba el cigarrillo, era de la época de Edith Piaf) y también por otros factores basados en su estilo de vida que habían llevado a que su cerebro se deteriorara.

Se predice hoy en día que 10 % de las personas con 65 años, 25 % de las personas con 75 años y 50 % de las personas con 85 años van a tener alzhéimer, esto son cifras muy altas y alarmantes. Algo que debemos tener claro es que perder la memoria no es una parte normal del proceso del envejecimiento. Y aunque hoy en día no hay cura exacta para la demencia lo que la ciencia sí está descubriendo es la causa y cómo podemos tratar de prevenirla.

Hay un cambio de paradigma hoy en el mundo de la salud que regresa el poder al individuo para tomar el control de su salud. El futuro del sistema de salud está acá y empieza por entender que tienes mucho más control sobre tu salud y tu futuro de lo que crees.

¿Qué afecta a tu cerebro? Tu alimentación, deficiencias de vitaminas, deficiencias de omega 3, deficiencias hormonales, inflamación, toxinas, estrés, falta de ejercicio y algunas veces es genético. Cuando entendemos que nuestra nutrición y nuestro estilo de vida es la base primordial no solo para nuestra salud física, sino cerebral, la prevención se convierte en el centro de nuestras acciones.

Entonces hoy quiero dejarte 5 prácticas para evitar la demencia y, lo mejor de todo, que no solo sirven para evitar la demencia, sino para evitar muchas otras enfermedades:

1. Ejercicio: entre las medidas más valoradas por los expertos se recomienda practicar ejercicio, según varios estudios, las personas mayores que realizaron con mayor disciplina ejercicio moderado tenían menos riesgo de demencia y deterioro cognitivo.

1. Dieta saludable: eres lo que comes, entonces no cabe duda que mantener una alimentación saludable ayuda a mantener una mente sana. Recuerda que los alimentos procesados, azucarados y con alto contenido de grasas saturadas llevan a la inflamación en el cuerpo y la inflamación del cuerpo lleva a la enfermedad.

1. Mantener la mente activa puede reducir los deterioros cognitivos, pues esto fortalece las conexiones neuronales. Incluye rutinas/actividades como leer cosas nuevas, hacer crucigramas, tomar clases de algo nuevo, aprender un nuevo idioma; todo esto apoyara a tu cerebro a mantenerse mas activo y mas sano.

1. Dormir bien: esta es una de las recomendaciones que más les doy a mis alumnas cuando están pasando por periodos complicados y es dormir bien. Durante el sueño, el cerebro procesa la información y se deshace de las toxinas acumuladas. Establecer una rutina de sueño regular y asegurarse de dormir lo suficiente (aproximadamente 7-8 horas por noche) puede mejorar la función cognitiva, el rendimiento mental y reducir el riesgo de deterioro cognitivo. Literalmente es el reset que tanto tu mente como tu energía necesitan para estar mejor.

1. Reducir el estrés: el estrés puede tener un impacto negativo en nuestro bienestar cognitivo. La práctica regular de técnicas de relajación, como la meditación, el yoga o la respiración consciente, pueden ayudar a reducir el estrés y promover la salud cerebral. Debes empezar a encontrar tiempo para el placer en tu vida, placer sano, cosas que te lleven a cultivar comunidad, a buscar el equilibrio, a entender cuáles son las cosas que te relajan y al mismo tiempo te hacen bien.

Entre más avanza la ciencia más nos estamos dando cuenta de que nuestro estilo de vida es una de las bases para nuestra salud no solo física y emocional, sino también mental. Ahora te dejo con estas preguntas para cerrar nuestro tiempo el día de hoy:

• ¿Qué tal si moviéramos nuestro cuerpo para sentirnos bien, no solo para adelgazar?

• ¿Qué tal si comiéramos para alimentarnos bien, no solo para llegar a cierto peso?

• ¿Qué tal si empezáramos a ver nuestro estilo de vida por lo que es, en ves de malgastar nuestro salud?

Toma conciencia hoy, la salud es algo que no se puede comprar o recuperar.

Be the light, share the light.

Sobre mí

Creadora de The Club, una comunidad de empoderamiento femenino. Cofundadora de la Fundación Animal Voices, cofundadora de Opal, conferencista, activista, emprendedora, viajera y amante de la naturaleza. Maestra de meditación de Academy of Breath, coach de Bienestar del Institute de Integrative Nutrition de Nueva York y graduada de Florida International University.

* Las opiniones dadas por Juliana Calle no representan la opinión de la revista Fucsia.