Con el protagonismo de la 'top' Naomi Campbell, vestida con un traje de transparencia y envuelta en flores artificiales -como evocando el ramo de matrimonio- el diseñador sorprendió con una colección creada para las novias modernas.
Trajes y vestidos con faldas de vuelo, en materiales como tul, velo y tafetán y apliques de pedrería y brillo hicieron parte de su propuesta.
Sin embargo, Gaultier también quiso dar un toque masculino a su colección, con enterizos unicolor y looks más cubiertos para las mujeres de más de 30 años, lo que se evidenció en las modelos que escogió para su pasarela.
"Uno de los objetivos de la alta moda es experimentar y resaltar el trabajo manual de los talleres, "¿por qué no detenerse en la boda y hacer trajes de novia?", aseguró a los periodistas que se acercaron a él, tras dar por terminada su presentación.