Las manos también necesitan un cuidado especial y aquí te mostramos cómo puedes hacerlo.
No hay duda en la cantidad de atención que le damos a la piel de nuestro rostro. Nos preocupamos por tener los productos correctos para la limpieza, para reparar esos aspectos que no nos gustan tanto (como arrugas, acné y manchas de sol), y a su vez para hidratar con el fin de lucir una cara radiante y, quizá también, para aminorar el paso de los años y sus efectos en nuestro aspecto específico.
Sin embargo, hay algunas zonas de las que nos olvidamos por darle toda nuestra atención al rostro yque son también muy importantes. En ese sentido hablamos del cuello e incluso también de las manos. La piel de nuestras manos merece un cuidado especial pues es una de las zonas donde el paso del tiempo y hasta los malos hábitos se pueden ver reflejar allí.
Y, al igual que ocurre con la cara, las manos son una de las partes de nuestro cuerpo que tienen mayor visibilidad, reflejan nuestros cuidados y hábitos, por ello es importante incluirlas en la rutina de belleza, aquí te mostramos cómo.
Las cremas hidratantes son fundamentales no solo para mantener la suavidad y elasticidad de la piel de la cara sino también para que se vea radiante. Lo mismo ocurre con las manos y es usual que muchas personas, de vez en cuando, tengan una pequeña crema hidratante en el bolso para poder aplicarse de vez en cuando.
Este hábito no debe faltar, pero podemos ayudar con más a la piel de nuestras manos, para ello existen mascarillas con ingredientes naturales que le aportarán a esta zona del cuerpo la luminosidad y lozanía que quizá han perdido por el paso del tiempo o por la falta de cuidado.
Esta mascarilla sirve para manos que están muy resecas. La idea es triturar las hojuelas de avena hasta que quede un polvo. Cuando la avena esté así, agrega la miel y el aceite de oliva en partes iguales hasta formar una pasta homogénea. Masajea tus manos, pues tiene propiedades exfoliantes, y deja actuar por 10 minutos.
Estos ingredientes revitalizarán tu piel y la sentirás más suave que nunca. Para hacerla debes calentar tres cucharadas de manteca de cacao en baño María. Cuando esté completamente líquida, agrega el aceite de ricino. Cuando esté cremosa, aplícala como si fuera una crema. No es necesario que la retires.
Si quieres preparar esta mascarilla de un gran poder antioxidante necesitas derretir dos cucharadas de manteca de mango, aceite de coco y si es posible también agrega cera de abejas. Déjala reposar y luego utilízara como crema de manos.
Los expertos también recomiendan dormir con guantes de algodón como medida contra la piel seca, ya que ayudan a mantener y sellar la humedad. Además garantizan que no hay ninguna contraindicación, siempre y cuando los guantes que uses sean cien por ciento de algodón (ya que otros materiales pueden causar irritación) y uses cremas con una base aceitosa en lugar de base acuosa (ya que una parte de la crema no va a actuar debido a que va a ser absorbida por la tela).