El actor vuelve lució unas imponentes botas de cuero de Saint Laurent en la premiere de The Last of Us 2, convirtiéndose en el centro de todas las miradas.
El estilo de Pedro Pascal ha vuelto a sacudir Internet y, en esta ocasión, lo ha hecho con un par de botas de cuero que desafían cualquier convención. En la premiere de The Last of Us 2, el actor apareció con una de las piezas más sugerentes de la colección masculina otoño 2025 de Saint Laurent: unas botas altísimas que rozan la cadera y que evocan la sensualidad del imaginario de Robert Mapplethorpe.
Lo que hace que este look sea aún más impactante es el contraste entre las dos mitades del conjunto. En la parte inferior, las botas de cuero negro y un pantalón a juego apenas visible crean una imagen nocturna, intensa. En la parte superior, Pascal equilibra la propuesta con un suéter de cuello alto en azul eléctrico y una americana de cuadros estructurada, en la que los hombros marcados—un sello de Saint Laurent—refuerzan la presencia imponente del actor.
Esta combinación de elementos encarna a la perfección la visión de Anthony Vaccarello para Saint Laurent: un hombre que navega entre la sofisticación clásica y la osadía de lo inesperado. La colección, definida por el propio diseñador como “respetable en la parte superior y algo obscena en la parte inferior”, encuentra en Pascal a su mejor embajador. No es solo el poder de la prenda, sino la actitud con la que la lleva lo que ha convertido este look en un fenómeno viral.
Más allá del revuelo en redes, la elección de Pascal nos muestra que la moda masculina vive un momento de transformación. Las reglas se han flexibilizado, y figuras como él demuestran que es posible jugar con el vestuario sin perder una pizca de sofisticación. Si las botas de Saint Laurent eran un guiño a la sensualidad y el exceso, su forma de llevarlas las eleva a un nuevo nivel: el de la seguridad absoluta.
Con cada aparición pública, Pedro Pascal sigue rompiendo moldes su capacidad para desafiar lo establecido sin esfuerzo, con una mezcla de irreverencia y elegancia, lo ha convertido en un ícono de estilo.