La diseñadora británica falleció pacíficamente en Londres.
Hasta los últimos minutos Vivienne Westwood hizo lo que más amaba, diseñar, trabajar en el mundo del arte, escribir su libro y cambiar el mundo, dice el mensaje oficial que confirmar el fallecimiento de la diseñadora de moda británica.
Políticamente incorrecta y pionera en su estilo, así fue la diseñadora quien falleció en su casa en Clapham, en el sur de Londres. Su marido y socio creativo Andreas Kronthaler, aseguro : “Seguiré con Vivienne en mi corazón. Hemos estado trabajando hasta el final y ella me ha dado muchas cosas para seguir adelante. Gracias cariño”.
La diseñadora será recordada por sus diseños andróginos y transgresos y su fuerte activismo por la crisis climática. Westwood fue la fue la pionera de la estética punk y New Wave en este país y con frecuencia llevó al extremo provocadoras creaciones que nunca dejaron indiferente al exigente sector de la moda.
Andrew Bolton, curador del Instituto de Vestuario del Museo Metropolitano de Nueva York, sostiene que Westwood “le dio al movimiento punk una apariencia, un estilo, y fue tan radical que se rompió con cualquier cosa del pasado”, dijo. “Las camisas rotas, los imperdibles, los eslóganes provocativos. Ella introdujo el posmodernismo. Fue tan destacado desde mediados de los años 70. El movimiento punk nunca se ha disipado, se ha convertido en parte de nuestro vocabulario de moda”.
Nacida dentro de una familia humilde en Londres, adelantó sus estudios, empezó dar cátedras y a crear su propia empresa hasta fortalecer una de las olas culturales más imponentes de los 70, el punk.
Parte de sus primeros diseños fueron exhibidos por los integrantes de la banda Sex Pistols, a quienes conoció por su esposo Malcolm McLaren, agente de la icónica agrupación y con quien tuvo un hijo, Joseph Ferdinand Corré.
Junto con McLaren fundaron la tienda SEX, que en su momento fue un importante punto de encuentro para el movimiento punk británico. La trayectoria Westwood también está acompañada de grandes colaboraciones, como lo fue el diseño del vestuario de la película That’ll Be the Day, los uniformes de las dependientas de Agent Provocateur, el diseño de la campaña ‘Save the Artic’ de Greenpeace, el diseño del vestido de bodas de la cantante Miley Cyrus, el famoso vestido de bodas de Carrie Bradshaw, el personaje de Sarah Jessica Parker en Sexo en Nueva York y más recientemente una colección de zapatillas para la marca Vans.
La británica estuvo fuertemente implicada con la sostenibilidad , sus desfiles fueron plataformas que incitan al debate, con pancartas en su colección primavera verano 2013 en alusión al cambio climático o al fracking en 2016 o con activisitas como la actriz Rose McGowan o John Sauven, director ejecutivo de Greenpeace, sobre la pasarela.
La diseñadora también reivindicó a la mujer dentro del mismo movimiento punk, dándole un puesto especial en sus creaciones que se envolvían en drapeados, desgastados, experimentación de materiales y textiles, cortes asimétricos enlazados en ensamblajes contemporáneos y sostenibles, que perfectamente podrían ser llevados en las calles industriales de Londres o en alfombras rojas y eventos exquisitos como la Gala del MET y los premios Óscar de la Academia.
8 abril de 1941- 29 diciembre de 2022