La energía de la Luna Negra nos hace sentir cierta inestabilidad, nos obliga a enfrentar algunos miedos y podemos tener momentos de duda e incertidumbre. Respiremos profundo, pensemos con cabeza fría y no hagamos caso a todo lo que oímos. Cuidemos de nuestra imagen y reflexionemos bien antes de hablar. Estemos dispuestos a servir. Confiemos en nuestra intuición.