Claudia y Camila Torres son coaches en hábitos y en esta ocasión nos enseñan la forma en la que podemos cuidar de nuestro intestino con nuestras acciones.
¿Has oído la frase: ¡El intestino es nuestro segundo cerebro!? Bueno, pues queremos contarte que este órgano tiene más neuronas que la espina dorsal y actúa independientemente del sistema nervioso central.
No solo es el encargado de continuar el proceso de la digestión de los alimentos que vienen del estómago y absorber los nutrientes (vitaminas, minerales, carbohidratos, grasas y proteínas) y el agua para usarlos en el cuerpo, en él, tenemos la parte más extensa y compleja del sistema inmunitario.
Por el intestino diariamente pasan muchísimos agentes externos y extraños para el cuerpo que pueden disparar el funcionamiento del sistema inmunitario, no obstante, este órgano es capaz de diferenciar cuáles son benéficos o no. Pero dependiendo de nuestros hábitos, la salud del intestino puede verse afectada, evitando que funcione correctamente y esto, al final, puede interferir directamente en el bienestar general de las personas.
Cuando comemos mal, nos estresamos, no dormimos bien, abusamos del alcohol, donde primero veremos las consecuencias será en nuestro sistema digestivo. Normalmente aparecen síntomas como colon irritable, cefaleas, flatulencia, estreñimiento o diarrea, dolor abdominal, intolerancias alimentarias y cambios en el peso.
Pero esto es apenas el comienzo de algo más complicado, hoy en día una de las dolencias más comunes que sufren las personas en el mundo, es la del intestino permeable, algo a lo que hasta ahora se le está poniendo atención ya que se ha relacionado con enfermedades más graves cómo la diabetes tipo 1, la esclerosis múltiple, la artritis reumatoide, la enfermedad celiaca, algunos tipos de cáncer, entre otras.
Aunque el intestino permeable es una condición que comienza en el aparato digestivo, puede afectar otros sistemas. Un intestino permeable se desarrolla cuando las células de las paredes se dañan, y cuando esto pasa, crece la posibilidad de que algo de lo que transita por el interior de este, pueda filtrarse en el torrente sanguíneo o en el sistema linfático.
Pero obviamente lo que logra colarse por la pared del intestino claramente no son grandes pedazos de comida, sino una combinación de diferentes cosas que normalmente serian desechadas por el cuerpo. Sin embargo, es importante entender que estas sustancias nunca deberían pasar la barrera intestinal, ya que el cuerpo reacciona y el sistema inmunitario se activa como protección porque los considera unos ‘intrusos’.
Esta reacción es tan importante que si se mantiene por mucho tiempo nuestro cuerpo empieza a trabajar mal y puede comenzar a atacar sus propias células, dando pie a enfermedades autoinmunes.
Regular la acidez del estómago. Los ácidos estomacales son esenciales en el correcto funcionamiento de nuestra digestión, cuando estos se desnivelan las reacciones químicas normales necesarias para absorber los nutrientes se deterioran, haciendo que tareas como la descomposición de carbohidratos no se realicen de forma correcta, lo que provoca una crecimiento de la población de bacterias en el intestino y, a su vez, molestias como gases, dolor e inflamación. Para regular la acidez:
El intestino es esencial en el buen mantenimiento de nuestra salud y, a pesar de que puede enfermarse por muchas cusas, definitivamente la causa principal está relacionada con llevar un estilo de vida poco saludable. Si ponemos especial atención en cómo nos alimentamos, evitamos productos llenos de toxinas, incluimos más alimentos que ayuden a mejorar la digestión, trabajamos nuestras emociones para controlar el estrés, hacemos ejercicio regularmente, dormimos bien, estaremos ayudando a mantener no solo una buena salud intestinal, sino un sistema inmunitario fuerte y una vida llena de bienestar.
Sobre Mishmashladies
Somos Claudia y Camila Torres y somos coaches en cambio de hábitos. Nuestra misión es que las personas logren un bienestar integral. Enseñamos a las personas a implementar hábitos de alimentación saludable de una manera efectiva y que perdure para toda la vida, por medio de espacios como redes sociales, talleres, conferencias, charlas e infoproductos digitales.