Identificar a tiempo las alertas frente a este tipo de cáncer puede salvarte la vida
El cáncer de seno o mama se origina cuando las células mamarias comienzan a crecer sin control. Puede comenzar en cualquiera de las 3 partes que hacen parte del seno como lo son los lobulillos, los conductos y el tejido conectivo.
Las células cancerosas normalmente forman un tumos que a menudo se puede palpar a través del autoexamen o por medio de la mamografía. Este tipo de cáncer ocurre generalmente en mujeres, aunque los hombres también la pueden padecer.
Es muy importante detectar la presencia de este cáncer a tiempo para evitar que pueda diseminarse fuera de la mama a través de los vasos sanguíneos y los vasos linfáticos y haga metástasis. De ahí la importancia de practicar el autoexamen con frecuencia y de observar si se evidencia algún cambio en la apariencia del seno.
Presencia de una masa o bulto nuevo. Ante cualquier tipo de abultamiento se debe consultar al especialista para determinar su causa y tratamiento.
Según el portal cancer.org, los siguientes son algunos de las principales señales de alerta:
No olvide que las pruebas de detección como la mamografía pueden ayudar a encontrar el cáncer de seno en sus comienzos, incluso antes de que aparezca algún síntoma.
El portal medlineplus.gov aconseja que se debe realizar el autoexamen mensual 3 a 5 días después del periodo ya que las mamas no están tan sensibles en ese momento del ciclo menstrual.
Si es una mujer que ha llegado a la menopausia se recomienda hacerse el autoexamen el mismo día todos los meses.
Para iniciar con este proceso, debe acostarse boca arriba pues cuando se está en esta posición es más fácil examinarse todo el tejido mamario. Una vez esté cómoda en esta posición siga los siguientes pasos: