Conocido por su uso culinario esta especia tiene múltiples beneficios para tu salud
El ajo es considerado como e alimento perfecto que no debe faltar en ninguna dieta por ser altamente nutritivo y tener pocas calorías.
Contiene minerales y vitaminas como el manganeso, vitaminas B6 y C, selenio, calcio, cobre o potasio, entre otros, lo que hace que tenga prácticamente todo lo que se necesita para subsistir, aunque en pequeñas cantidades. Además, contiene alicina, reconocida por sus propiedades antibióticas.
Según el portal gastrolabweb hasta ahora no hay una evidencia científica que demuestre que el mejor momento para consumir el ajo es en las mañanas o antes de ir a dormir. Lo que sí se sabe es que su consumo regular puede ayudar a tu sistema inmunológico y beneficiarte de otras maneras.
Se dice que consumir un ajo en ayunas ayuda a aumentar los niveles de colesterol bueno (HDL) en la sangre.
Además, gracias a las propiedades hipotensoras, hipolipemiantes, depurantes y antiinflamatorias del ajo, su consumo regular ayuda a reducir los niveles de colesterol malo (LDL) y triglicéridos del organismo.
El consumir ajo ayuda a la salud cardiovascular reduciendo la presión alta. Al disminuir el colesterol LDL y los triglicéridos, previene trombos y mejora la circulación sanguínea, lo que previene las enfermedades cardiacas.
Por sus beneficios antibióticos y antibacterianos, ayuda a aliviar las molestias gastrointestinales causadas por la fermentación de los alimentos en el intestino. De igual manera, disminuye dolor, flatulencias o calambres intestinales.
El consumo de ajo es aconsejable para descongestionar las vías respiratorias y combatir los microorganismos en los pulmones de forma natural.
El ajo potencia las funciones del hígado y del páncreas porque estimula el desarrollo de insulina en el organismo. De igual manera, contribuye a regular los niveles de glucosa en el organismo.
Como contribuye a regular el metabolismo porque estimula los ácidos gástricos, esto ayuda a perder peso.
Para algunos, el ajo posee quercetina, un potente flavonoide que evita el envejecimiento celular.
Además, tiene vitamina C que sirve para la producción de colágeno, la proteína antiedad que mantiene la piel elástica, joven y radiante.
El ajo también posee vitamina B6, que se asocia a la mejora en la función cerebral.
El ajo es una muy buena alternativa para que la incluyamos en nuestra dieta diaria, sin embargo, hay que tener en cuenta que comer un ajo todas las mañanas no es suficiente para eliminar cualquier enfermedad que presente nuestro organismo.