El lugar de reunión por excelencia en la esperada Nochebuena. Exquisito para el paladar y para el ojo, los invitados esperan por una decoración clásica, elegante y sobre todo, original. Sorpréndelos con innovadoras creaciones según las tendencias del 2011. Diseño y calor de hogar sobre la mesa.
Faltan cinco para las doce y es momento de dejar la mesa a punto. Los pequeños detalles y la correcta combinación de los colores navideños con flores hacen la diferencia. Un buen espacio, iluminación y música, transportan a la familia a una verdadera cena de Navidad. Consejos para que te conviertas en la anfitriona perfecta.
Mesas con flores
Un centro de mesa compuesto por cajas decorativas de Navidad de diferentes tamaños (que no excedan los 15 centímetros), puestas sobre un soporte de unos 10 centímetros de altura. Puedes forrarlas con papel celofán y cabuyas. Rosas y flores naturales a manera de corona, dispuestas alrededor de los aderezos que acompañarán la cena. Cada plato con pequeños dulces rojos y verdes, esparcidos a lo largo de la mesa. El mantel y la vajilla blanca permiten una linda combinación con los colores dorado, el rojo y el verde, sin caer en excesos.
Mesa brillante
Copas y más copas, las protagonistas de la noche. La pulcritud es esencial para este diseño: vasos limpios y brillantes. Utiliza copa de diferentes tamaños y ponlas en el centro de la mesa, a manera de adorno. Tiras de papel tornasol dorado entrelazadas en las copas (ojo con que no terminen enredándose entre sí) y detalles con accesorios escarchados en las servilletas de decoración o junto a cada plato individual. Cubiertos de plata sujetos a un anillo hecho con pequeñísimas flores brillantes.
Mesas románticas y navideñas
Los arreglos florales propician el ambiente cálido e invitan a disfrutar del espacio que los rodea. Las rosas rojas son perfectas para este fin. Mezcla chamizos o cascabeles y botones de eucalipto, elementos propios del espíritu de la Navidad, además de expeler un agradable aroma sin que sobrecargue el ambiente. Deja una parte de la iluminación sobre la mesa: candelabros (que no sean ostentosos) y lámparas en las esquinas, para que la luz quede a la misma altura de los invitados. O si prefieres, decora con centros de mesa de mediana altura con detalles como velas gruesas y cortas, dulces dorados y platos coloridos.
Mesa roja
Si prefieres la uniformidad en colores, como mínimo debes elegir dos. Para que sea una decoración viva y para la fecha, la mejor elección es la dualidad entre rojo y blanco. Pon en cada silla un adorno propio de la época, como gorros de Papá Noel, botines o bastones roji-blancos. Para el centro de mesa, usa candelabros de vidrio y en la cima pon ladeadas las bolas con las que se decoran los árboles de navidad (en diferentes tamaños, tanto los candelabros como las esferas). El plato para la cena principal de color blanco, el plato para el postre de tono rojo encendido.
Para tener en cuenta
• No recargues la decoración con muchos accesorios pequeños. Harán estorbo al momento de servir. La sobriedad es igual a elegancia, más aún cuando es el momento de comer.
• El líquido (vino, champaña, jugos naturales, agua, etc.) deben ser asequibles para todos. Si la mesa es larga, distribuye los líquidos en dos partes de la mesa para que estén al alcance de todos los invitados.
• Deja una zona para niños, junto a la mesa principal.
• Elige 3 colores específicos, no caigas en las mezcolanzas. Piensa en uniformidad. El rojo, verde, dorado y blanco se imponen nuevamente para este año. Los tonos plateados y la gama de azules están out.