En entrevista con FUCSIA nos contó sobre lo que fue este reto en su carrera actoral.
La talentosa actriz colombiana Majo Vargas dio un giro sorprendente en su carrera al unirse al elenco de la nueva producción latina de HBO Max, “Te Quiero y Me Duele”. Este emocionante proyecto combina elementos de romance y descubrimiento juvenil y se destacó como uno de los estrenos más esperados de la plataforma en el pasado mes de agosto.
Lo más notable de esta participación es que Majo Vargas, conocida por sus interpretaciones de mujeres fuertes, positivas y bondadosas, se enfrenta a un desafío particular en esta serie. En “Te Quiero y Me Duele”, la actriz asumió el papel de Romina Guerrero, la villana que hará la vida imposible a los protagonistas.
Hasta ahora, la carrera en ascenso de Vargas la había llevado por un camino de personajes inspiradores y llenos de bondad. Sin embargo, esta vez, su interpretación promete ser un homenaje a las telenovelas y un recordatorio de que todos tenemos nuestras capas y corazas que, en ocasiones, nos impiden amar de manera vulnerable y auténtica.
La propia Majo Vargas compartió su emoción en una entrevista con FUCSIA, describiendo este nuevo papel como algo que “desiste de ser una ilusión y se convierte en realidad” además destacó la relevancia de su personaje en la serie.
“Este personaje es alguien con el cual se van a sentir identificados. Porque sé que muchos de nosotros tenemos muchas corazas a veces, que nos impiden amar de manera vulnerable, real y genuina”, expresó Vargas. “Esta mujer tiene todas las ganas de amar con todo su corazón, pero esas capas se lo impiden en su totalidad. Poco a poco en la serie, esas capas se van desprendiendo, y nos van dando a conocer a una Romina un poco más entregada.”
Majo se muestra segura de que muchas mujeres se verán reflejadas en la complejidad y la evolución de su personaje en “Te Quiero y Me Duele”. Su interpretación promete desafiar las expectativas y demostrar la versatilidad de esta talentosa actriz colombiana. La serie no solo se destaca como una producción importante de HBO Max, sino también como un vehículo para explorar emociones humanas profundas y matizadas en un emocionante contexto de telenovela.
“Romina y yo nos venimos conociendo, descubriendo quiénes somos. Venimos persiguiendo nuestros sueños y amando con todo nuestro corazón. En eso nos parecemos Romina y yo”, reveló Majo, destacando la conexión que siente con el papel que interpreta en la serie. Este paralelismo entre actriz y personaje agrega una capa de autenticidad a su interpretación, lo que promete dar profundidad y realismo al papel de Romina Guerrero.
A pesar de que Romina está perfilada como la villana en la trama de “Te Quiero y Me Duele”, Majo Vargas desafía la concepción tradicional de “buenos” y “malos”. La actriz argumenta que en la vida real no existen personas inherentemente malvadas, sino individuos que toman decisiones basadas en sus propias motivaciones y experiencias.
“En realidad no hay malos. No hay un personaje que represente la maldad. Todos tienen un por qué, un cimiento, una raíz del por qué son así. Vamos a ver a Romina, desde el amor ciego, cuáles son las acciones que toma que hacen que no la queramos tanto de vez en cuando”, explicó Majo. Este enfoque en la complejidad de los personajes promete una serie que desafía los estereotipos y permite a los espectadores explorar las motivaciones detrás de las acciones de cada personaje.
En sus reflexiones compartidas en Instagram, Majo Vargas expresó su profunda gratitud y emoción por el camino que ha recorrido. Ella considera que ha demostrado que el viejo adagio de “los sueños se hacen realidad” es cierto. Su participación en “Te Quiero y Me Duele” representa la culminación de un sueño, y su entrega a su personaje y la historia es un testimonio del compromiso y la pasión que aporta a su trabajo como actriz.
En resumen, Majo Vargas no solo da vida a su personaje en la pantalla, sino que también se involucra profundamente en el proceso creativo y en la búsqueda de conexiones entre la realidad y la ficción. Su papel en “Te Quiero y Me Duele” no solo desafía las expectativas tradicionales de los personajes villanos, sino que también le permite vivir su propio sueño en el proceso, demostrando que, en la vida y en el arte, los sueños pueden hacerse realidad.