En “Poder F”, Marcela Alarcón habla con el Dr. León Michaan sobre el manejo del duelo en el momento de perder a nuestros peludos amigos
Las mascotas llegan para hacer parte de nuestra familia, se convierten en un miembro más de ella, llenando un espacio dentro de cada hogar. Cuando tenemos que darles el último adiós es uno de los instantes de nuestra vida más dolorosos y hoy en “Poder F” el doctor León Michaan, médico psiquiatra, psicoterapeuta y psicooncólogo, experto en terapia asistida con animales, hablará sobre ese duelo que irremediablemente tenemos que vivir quienes amamos a nuestras mascotas.
El doctor Michaan afirma que el vínculo con una mascota puede llegar a ser muy fuerte e incluso hay ocasiones que puede ser más intenso que el que se tiene con la familia. Pero, para entenderlo, en este pódcast, el médico nos habla de la existencia de este lazo desde el origen de la humanidad cuando los animales fueron domesticados.
En el caso de los perros, descubrieron que la asociación con estos animales fue creando cada vez vínculos más fuertes. Es así como se pasa de tener animales fuera de casa que ayudaban en la cacería y en el trabajo a tener mascotas que hacen parte de la familia.
Para muchos dueños de perros y gatos es como tener un hijo y así lo pueden expresar, sin embargo, el doctor León explica en “Poder F” cuando alguien dice es que “es mi hijo”, no es que sienta que realmente es su hijo como un humano, pero si hay una relación tan grande en la que sí se siente una responsabilidad por la mascota a un nivel similar a ,la que se tiene con los hijos.
Es la pérdida de una mascota lleva a un proceso de duelo igual de doloroso que cuando se pierde a un ser querido. Es un proceso muy duro, pero como cualquier otro duelo hay que dejar que ocurra y es imposible de prevenir, pues nunca se está preparado para ese momento en el cual le tenemos que dar el último adiós a nuestra mascota.
Según este experto profesional, las personas podemos creer que estamos preparados para esta separación, pero cuando llega ese momento el dolor de la pérdida igual va a surgir, así en teoría nos hayamos preparado con antelación.
Tenemos que ser conscientes que parte de tener mascotas es aceptar que esto va a ocurrir, pero todo lo positivo que implica tener mascota para tu calidad de vida, para tu salud mental, para la salud de la familia, etc., sobrepasa por mucho ese dolor final.
“Uno necesita un tiempo para hacerse a la idea y tomar la decisión de ayudarlo a morir, pero no se debe aferrar a la mascota sin tener en cuenta el sufrimiento de ella. Lo mejor es estar ahí con ellos en ese momento (...) es muy doloroso, pero después es muy reconfortante haberlo ayudado a pasar al otro lado”, afirma el doctor Michaan.
“Fue una buena mascota, ahora sea usted un buen amo”.