En entrevista con FUCSIA nos contó sobre los retos de asumir esta importante posición de ese gigante del lujo.
Carolina Ortiz, la destacada Directora de Comunicaciones de Tiffany & Co. para Latinoamérica, el Caribe y Miami, se muestra como una de las estrategas de marketing más respetadas y experimentadas en el ámbito del lujo. Con más de 24 años de experiencia en Estados Unidos, ha dedicado su vida a elevar y transformar marcas icónicas, impregnándolas con una perspectiva auténticamente latinoamericana y promoviendo un crecimiento acelerado en este competitivo mercado.
Originaria de Colombia, Carolina ha logrado consolidar su posición como una figura influyente en la industria del lujo. Su enfoque estratégico directo y su habilidad para posicionar marcas a través de diversas plataformas de marketing y comunicación, así como en la planificación de compras, relaciones públicas, eventos y marketing directo impulsado por CRM, clienteling y análisis, han sido fundamentales en su exitosa carrera.
Como arquitecta de campañas y programas que no solo fortalecen y elevan el valor de las marcas, sino que también aceleran la adquisición de clientes y fomentan una mentalidad compartida, ha liderado equipos en Estados Unidos, Brasil y México. Su visión, estilo y personalidad han consolidado relaciones de éxito con algunas de las marcas de moda y lujo más reconocidas a nivel mundial.
En entrevista con FUCSIA, Ortiz nos compartió su entusiasmo por los nuevos desafíos que su cargo conlleva. Habló sobre cómo pretende infundir una perspectiva fresca y dinámica a la icónica marca de lujo.
Construyes una carrera notable en Tiffany & Co., ascendiendo desde el puesto de marketing manager hasta tu reciente nombramiento como vicepresidenta de PR y Comunicaciones para Latinoamérica, Miami y el Caribe. ¿Cómo describirías tu trayectoria y qué aspectos consideras más significativos en tu desarrollo profesional dentro de la compañía?
Se me ocurren mil palabras para describir estos casi 20 años de carrera, no solo limitándolo a mi trabajo actual. Pero si pudiera escoger las tres mas importantes serian recursividad, agilidad y pasión. Creo que lo más significativo ha sido innovar constantemente en un mundo que no para de cambiar nunca. Ahora, si hablamos de lo más fascinante es definitivamente mezclar la necesidad de cambio con una marca legendaria, llena de historia e influencia en el mundo durante los últimos casi 200 años.
Durante tu tiempo en Tiffany & Co., ¿cuáles han sido los desafíos más destacados que has enfrentado al dirigir las estrategias de comunicación para adaptar la marca a las diversas culturas y mercados de la región?
El desafío más grande ha sido demostrar que es Latinoamérica. La región es extremadamente compleja. Creo que no hay mucha gente que realmente entienda lo que implica trabajar eficientemente para ella. Tenemos una diversidad de mercados, idiomas, culturas, leyes, y dinámicas sociales que implican adaptarse con mucha agilidad. Adicionalmente, demostrar el potencial enorme que tiene en el mundo de lujo, no solo en cada país, si no como clientes que compran en todo el mundo. El latino busca lujo, se antoja de lujo y disfruta de comprar lujo.
¿Cómo defines el legado que deseas dejar en el mundo del lujo y qué pasos has tomado para asegurarte de que tus contribuciones tengan un impacto duradero?
Me emociona mucho pensar que lo que hago tiene un impacto, porque cada cosa que me invento, construyo y ejecuto, lo hago con la intención de dejar un legado y no solo de cumplir un plan o hacer un evento, sino de ir más allá. Lo hago pensando en dejar una huella latina permanente en el mundo del lujo, en hacer historia.
Como mujer en una posición de liderazgo, ¿cuáles han sido los mayores desafíos que has enfrentado y cómo has utilizado tu voz fuerte y fundamentada para superarlos y avanzar en tu carrera?
Como mujer, siempre he pensado que, aunque existan más desafíos para nosotras en general, no solo en el aspecto profesional, no podemos limitarnos por esta realidad. ¡Sí se puede! Siendo asertivas, teniendo una voz fuerte y fundamentada, y no dejando de querer aprender de lo que hacemos nunca. La fortaleza de las mujeres es simplemente superior; la naturaleza lo quiso así.