Esta empresaria ha logrado promover la identidad afro ante el mundo uniendo sus dos grandes pasiones: la moda y sus orígenes
“Soy una mujer que día a día trata de inspirar a las nuevas generaciones y a motivarlas a realizar sus sueños, a conquistarlos, a no tener límites, que si realmente quieren algo se concentren y vayan por eso. Soy una mujer que a través de su historia de vida, de su historia de superación, ha logrado con su esfuerzo y dedicación diferentes posiciones, y para mí, esa es una forma de representar una etnia, de representar mi cultura”.
Es así como esta comunicadora comienza a contar cómo ha sido ese recorrido por la vida para llegar a tener el reconocimiento que hoy tiene en el mundo del diseño y de la moda, demostrando que sí es posible promover cultura en espacios inimaginables luciendo prendas afro.
“Para mí, la moda siempre ha sido como un canal para expresarse ya sea a nivel cultural. Con la moda uno lo puede ver como un medio para decir quién eres y qué imagen quieres dar ante el mundo, o qué quieres reflejar (...) entonces, tomar la moda como ese medio, como ese canal para demostrar una expresión cultural o un tema de identidad es muy importante, sobre todo, para los jóvenes, para las nuevas generaciones porque están diciendo aquí estoy yo, soy esta persona y lo digo a través de los atuendos o prendas de vestir que utilizo”.
Y es que es innegable la sangre afro que corre por las venas de esta emprendedora, quien en su sola manera de hablar y de expresarse muestra amor profundo por sus raíces y la satisfacción de haber podido poner en alto lo más profundo de su mundo afro a partir de vestidos que, por sus diseños, hablan por sí mismos de la riqueza heredada de sus ancestros.
Natalia, sin duda alguna, es una mujer exitosa y por eso se ha convertido en el ejemplo para otras mujeres que buscan también ver realizados sus sueños. En cada uno de sus proyectos busca unir sus dos grandes pasiones: la moda y la cultura afro, porque la mujer afro de hoy tiene mucha historia que contar y qué mejor medio para hacerlo que a través de la forma como se viste.
“Soy una mujer joven que le encanta inspirar a las nuevas generaciones a través del emprendimiento, a través de su historia de vida, a través de lo que hago. Para mi, Natalia Marrugo es muy importante a través de la pasión que tengo por la moda poder expresar ese sentir cultural que tengo, ese orgullo que tengo por mis orígenes, por mis ancestros que en este caso son afrodescendientes”.
Está orgullosamente convencida de lo que han logrado hacer muchas mujeres afrodescendientes, quienes cada día se destacan más en sus labores, oficios y proyectos, cambiando con esto estereotipos y creencias dentro de la sociedad actual.
“Siento que como mujer afro nos toca recorrer un camino un poco más complicados para acceder a ciertas posiciones ya sea a nivel académico, a nivel laboral, a nivel empresarial, el esfuerzo que debemos hacer es mucho más grande. Entonces yo creo que eso también es una forma de discriminación. Sin embargo, afortunadamente los discursos y las prácticas han ido cambiando con el tiempo y con los años y hoy podemos decir que en diferentes espacios que realmente están liderando procesos significativos en el tema afro”.
Para Natalia este cambio no ha sido al azar, por el contrario, ella piensa que toda esta motivación y promoción de su cultura se ha logrado gracias a ciertas características que tiene la mujer afro como lo son la resiliencia, el no parar cuando se proponen algo en la vida y a esa fuerza interior que siempre está con ellas.
Por ese amor a sus raíces, Natalia hace parte del directorio de referentes étnicos que se está creando desde el programa Juntanza Ética una iniciativa liderada por USAID y ACDI/VOCA, en donde se aúnan esfuerzos para reconocer los aportes de los pueblos afrocolombianos.
“Creo que con interés y con esa resiliencia hemos demostrado que sí podemos hacerlo y que realmente más allá de los estereotipos y de los imaginarios sociales no hay límites para la mujer afro (...) somos poderosas, porque cuando conocemos y tenemos claro el significado o el sentir afro, realmente cuando nos proponemos conquistar un espacio ya sea a nivel laboral académico, cultural o empresarial, realmente no tenemos límites, sacamos esa fuerza interior para ser un ejemplo para las niñas que nos están viendo, para las nuevas generaciones”.
Preguntarle a Natalia acerca de dónde salió esa idea de ser empresaria es tocarle el alma, pues a través de sus ojos brillantes se puede evidenciar la emoción que le causa hablar del tema. Para ella, la creación de su propia marca ha sido un sueño hecho realidad, un reto que le ha implicado superar las barreras del ¿qué dirán?, para darle paso a “me siento orgullosa de lo que estoy haciendo”.
“Uno a veces viene realizando los sueños, pero no se da cuenta de que los sueños de uno terminan siendo los sueños de otras personas también. Cuando las personas ven ese impacto que estás creando en una sociedad te llegan mensajes, te llegan palabras como ’me siento orgullosa o me siento representada en lo que estás haciendo’. Para mí esa ha sido la mayor motivación.
Y complementa afirmando lo siguiente: “realmente estar en espacios inimaginables luciendo prendas afro o que la marca Kolo la quieran utilizar personas que antes no se atrevían a llevar un estampado africano por el miedo al qué dirán, es la mayor satisfacción que uno puede tener”.
Empezar no es fácil. Y si hablamos de empezar una empresa, el reto puede ser aún mayor. No solo porque requieres de recursos económicos, sino porque tienes que enfrentar tus propias inseguridades. Por eso, el consejo que deja Natalia para todas las mujeres que quieren emprender se basa en la dedicación y la perseverancia: “necesitas de constancia, dedicación muchas veces vas a tener clientes que están encantados con el servicio que tú les brindas con el producto, pero otras veces también te van a enfrentar a situaciones que debes aprender a manejar. Yo creo que entre más va creciendo la marca, el proyecto o el emprendimiento, te vas a enfrentar a otros obstáculos mayores”.
Finalmente, esta empresaria deja en claro cuáles son los objetivos de su marca, de seguir luchando día a día por dar a conocer sus prendas y diseños al mundo entero y, sobre todo, de poder seguir siendo fuente de trabajo para muchas mujeres cuyo ingreso depende de este emprendimiento.
“Yo creo que a través de las prendas de los diseños, de los atuendos, nosotros logramos promover ese orgullo, autoconocimiento y empoderamiento de la cultura afro. Mucha gente que se acerca incluso me hace preguntas por el significado de los patrones o por qué se utiliza un turbante, más allá de que sea un tema de moda, momentáneo, es el hecho de generar un impacto”. Además, que personas influyentes se acerquen a nosotros y nos digan ‘me encanta lo que hacen’ genera una satisfacción grande”.
#JuntanzaÉtnica de @USAID y @Acdivocacol #OrgulloPorLoÉtnico