Lecciones básicas para definir y mantener a las responsables de enmarcar tu mirada.
Lo tenemos claro, la tendencia beauty más codiciada son las cejas gruesas, pobladas y de aspecto muy natural. Si tú también quieres conseguir la forma, el tamaño y la textura de la ceja perfecta primero debes saber que esto no es un milagro que ocurre de la noche a la mañana. Sin embargo, con un poco de paciencia y autocontrol –spoiler alert: está prohibido pasarse el día con las pinzas en la mano frente a un espejo de aumento– en un tiempo podrás presumir de cejas espectaculares. Por eso hemos creado esta útil guía para que dejes salir a la experta en cejas que llevas dentro.
Antes de que empieces...
El primer paso hacia unas cejas perfectas es determinar si tus cejas son lo suficientemente gruesas para depilarlas y darles forma. No te preocupe si descubres que no cumplen con algunos estándares o tendencias de grosor, puedes hacerlas crecer. Antes de acostarte, masajea tus cejas por 3-5 minutos con aceite de ricino, aceite de oliva o aceite de almendras para acelerar el crecimiento del pelo. Una dieta saludable también puede ejercer su magia no solo en el pelo de la cabeza, sino también en todo su cuerpo: incluye pescado (especialmente salmón), nueces, pasas y productos de soya en tu dieta. Estos estimularán el crecimiento del pelo y fortalecerán los folículos capilares. No tendrá que esperar mucho para obtener resultados sorprendentes.
Encuentra la forma de ceja perfecta para tu cara
Si tu cara es redonda, intenta crear un arco tan alto como puedas. Busca una forma de cejas que siga una línea recta hasta el pico de la ceja y manténte alejada de las formas redondeadas. Esto hará que tu cara se vea muy redonda. Para una cara cuadrada considera una forma de ceja curva, suave o con ángulos fuertes. Manténte alejada de las formas de cejas finas y cortas. Si tienes la cara en forma de corazón opta por un arco bajo y una forma de ceja redondeada, ya que crea un aspecto más natural. Evita las cejas arqueadas. Por último, si tienes una cara ovalada, elige una forma de ceja plana y de ángulos suaves. Asegurate de que los ángulos vayan hacia arriba, y luego curva suavemente alrededor de la parte superior.
Para identificar los tres puntos que tienes que observar al dar forma a tus cejas, usa el método “lápiz”. Pon un lápiz en línea recta a lo largo del lado de la nariz; este será el comienzo (interior) de la ceja. Luego, ubica el lápiz a lo largo de tu nariz y sobre tu pupila: este será el arco y la parte más alta de tus cejas. Ahora mueve el lápiz en diagonal, de modo que el extremo de tu fosa nasal y el borde externo de tu ojo estén en línea, esto marcará el final de tu ceja.
Elige el método
Según los expertos la depilación con pinzas es la técnica más recomendada. La cera puede terminar estirando tu piel o siendo un poco imprecisa, y la técnica de hilo puede romper el pelo, además de que ambas opciones pueden no ser del todo higiénicas. Si decides depilar con pinzas, asegúrate de tirar del pelo en la dirección del crecimiento y lo más cerca posible a la raíz. Hacerlo de forma incorrecta puede hacer que crezca más grueso. Y aunque es cierto que unas buenas pinzas pueden durar de cuatro a cinco años, es necesario limpiar la punta con alcohol al menos una vez al mes para eliminar cualquier residuo.
Ahora sí, ¡manos a la obra!
Paso 1
Snip, snip
Primero, con un cepillo especial peina tus cejas hacia arriba. Luego corta los pelos que sobresalen por encima de la línea de las cejas con un par de tijeras para uñas o tijeras para cejas.
Paso 2
Calma tu piel
Darle a tu piel el mejor trato es necesario para unas cejas perfectas. Por eso, antes de comenzar a depilar, masajea suavemente una cantidad generosa de tu aceite facial favorito en el hueso de la ceja. Esto lubricará la piel y el folículo capilar, evitando que el pelo se rompa en el proceso y eliminará la sensibilidad de la piel ante el uso de las pinzas.
Paso 3
3,2,1…¡fuera!
Repite este mantra: menos es más. Para hacer que el proceso sea más indoloro, jala el pelo en la dirección del crecimiento mientras mantienes la piel tirante. Recuerda usar siempre luz natural y olvídate del espejo de aumento. Con ellos perdemos la perspectiva de todo el rostro y de ambas cejas; esto es porque solo nos centramos en una al acercarnos demasiado. El resultado suele ser una ceja más depilada que la otra, por diferentes sitios, e incluso heridas por querer quitar pelos que aún no han terminado de salir. Comienza por eliminar los pelitos que nacen antes del comienzo determinado por el “método del lápiz”. Luego haz lo mismo con los pelitos que se encuentren debajo de tu arco y más allá del extremo final determinado. Para evitar exageraciones el truco está es depilar poco a poco y cada tanto alejarse del espejo para obtener una mejor perspectiva.
*Huye de la simetría. Las cejas son hermanas pero no gemelas. Estas pequeñas diferencias son las que nos hacen únicas y forman parte de nuestra personalidad. Por eso no hay que obsesionarse en lograr un diseño perfectamente simétrico.
Paso 4
Ponle fin al enrojecimiento
La depilación puede irritar tu piel, así que asegúrate de calmar inmediatamente cualquier irritación y cerrar los poros aplicando un gel refrescante.
Proporcionarles los cuidados necesarios.
Al igual que cuidas tu piel, pelo y pestañas, también debes aplicar los tratamientos y cuidados necesarios para que tus cejas luzcan bonitas y perfectas. No olvides cepillarlas a diario. Dedica unos minutos al día para peinar tus cejas, ya que no sólo pondrás en su sitio a los pelitos más rebeldes, sino que también activarás la circulación en la zona. Al obtener mayor riego sanguíneo crecerán más, será muy bueno en caso de estar intentando corregir la forma, lucirán más tupidas y con un bonito brillo natural. Sobre todo, mantén las pinzas a distancia durante al menos seis semanas! Una vez cumplido el tiempo, puedes repetir los pasos.
¡Ahí lo tienes! Ahora eres la orgullosa dueña de unas cejas perfectas.