Toma nota porque tienen fácil solución
En teoría, la búsqueda de toda amante del maquillaje es conseguir un rostro con tono unificado, sin imperfecciones y con aspecto natural. Sin embargo, en la práctica las cosas pueden ser algo distintas. Conseguir que la base del maquillaje quede perfecta no es tan sencillo como parece.
Desde parches notorios, coberturas insuficientes o de acabados artificiales son los errores más comunes. Pero fresca, todo tiene solución.
Elegir mal el tono
Si eliges un tono de base distinto al del tono de tu rostro, creelo- se va a notar. El error de principiante más común es querer elegir uno más oscuro que el tono real. Pero ¡pilas! para eso es el blush o bronceador. La base debe utilizarse únicamente para unificar la piel y embellecerla.
Listo. Eres un poco más pro que eso, y jamás caerías en ese error- ¿pero aún así no consigues dar con el tono ideal? La respuesta está en que seguramente pruebas el tono en el lugar equivocado, como por ejemplo en la muñeca. Este gesto habitual es el primer paso para conducirte al fracaso. Pues nunca, ¡pero nunca! debes probar la base en un lugar que no sea tu rostro (y si llevas maquillaje en el momento puedes hacerlo en el cuello).
Es la única manera de asegurarte de haber dado con el tono correcto.
Ignorar la fórmula
No todas las bases funcionan para tu tipo de piel- por más que el color de en el punto exacto, puede que la fórmula no le convenga a tu tez. Y aunque no lo creas, no es tan difícil como parece.
Las pieles secas deben buscar una base que sea hidratante y deje un acabado ligero, que mantenga la humedad y no se cuartee. Olvídate de las que vienen en formato de mousse pues secarán tu piel, remarcando cada pliegue, arruga o imperfección. Lo mismo para las bases en polvo, que paradójicamente tampoco son recomendadas para pieles grasas. En cambio las pieles mixtas sí se benefician de sus características.
En el caso de las grasas (y mixtas) se debe identificar siempre en la etiqueta de la base: oil free. Es la única fórmula que garantiza que la base permanezca asentada y dure el mayor tiempo posible.
El orden de los factores sí afecta el resultado
Si tu rutina empieza por la base, seguida de un full make up routine- contour, iluminador, etc- y finalmente maquillas los ojos, estás cometiendo el peor error de todos. Y aunque sí, así nos enseñaron a hacerlo y así lo hemos hecho siempre, a todas nos ha pasado que el delineador nos arruina un contour perfecto o la pestañina estropea tu esfuerzo para cubrir tus ojeras. Por eso, por más extraño que parezca, lo cierto es que el orden de los factores sí afecta el resultado.
Maquillar primero los ojos y después el rostro permite que en caso que caiga residuo de tus sombras o te manches con la pestañina se pueda eliminar fácilmente permitiendo que la base cumpla su función: piel luminosa, sin imperfecciones, manchas, parches de distintos colores, y un acabado natural.
Dosis equivocada
La base debe ser precisamente eso: la base para tu maquillaje. Eso quiere decir que después de aplicarla tu rostro no se verá perfecto, es sólo el primer paso. Por más lógico que sea querer que la base disimule todas las imperfecciones aplicarla en altas cantidades termina siendo una tortura insoportable para tu piel sin siquiera cumplir la misión.
En primer lugar, las zonas con granitos o con irritaciones debe ser tratada con un corrector. Después debes aplicar la base- con mesura. Finalmente puedes sellarla con polvos matificantes.
Herramientas
Existen muchas opciones en el mercado de herramientas para aplicar la base. Desde las que prometen no dejar rastro del trazo, redondas, planas ovales, grandes o pequeñas que permiten el acceso a las áreas más pequeñas del rostro, hasta las afamadas esponjas beauty blender.
Lo cierto es que no existe una única herramienta ideal. En este aspecto sólo vale prueba y error. Eso sí, si identificas que la tuya absorbe más producto del necesario, te marca el trazo o no unifica el tono, ya sabes que es cuestión de cambiar de herramienta.
Descubre para qué sirve cada brocha de maquillaje y cómo usarlas correctamente
Un último consejo.
Si tu piel no está bien preparada para recibir la base, ¡ninguna de estas recomendaciones surtirá efecto! Por eso es importante que descubras todo lo que tienes que saber de los sprays fijadores de maquillaje- el mejor aliado para tu base antes y después.