Diego Di Marco ha encontrado el éxito –y la juventud- escribiendo varios libros que aconsejan cómo mantenerse jóvenes, a partir de la salud, de mano de la Exmiss Universo, Lupita Jones.
En su libro ABC para rejuvenecer revela claves encontradas a lo largo de los años por la ciencia y la experiencia, no para verse sin arrugas, sino para cumplir años sin tener enfermedades crónicas, problemas de fatiga y estrés. Lo que, sin duda, resulta en una mejor apariencia. Di Marco da estas sugerencias basado en las teorías de la Academia Americana de Medicina Antienvejecimiento.
Te damos algunas de sus más importantes ideas.
1. Chao glúten: muchas veces nos dicen que los alimentos que contienen esta proteína no son buenos para la salud, pero poco sabemos de qué se trata. Se encuentra en varios cereales como la avena, el trigo y la cebada y puede ser causante de alergias de todo tipo.
2. Los desequilibrios hormonales aceleran el envejecimiento: las toxinas y los alimentos de mala calidad hacen más rápido el proceso de envejecimiento a nivel celular. Por eso, debes incluir en la dieta aceites omega-3, como el aceite de coco, de linaza, suplementos de aceite de pescado. Esto ayuda a que circule el oxígeno entre nuestras células y estas estén bien hidratadas.
3. Adiós a los radicales libres: según la medicina antienvejecimiento, estos dañan las células, nos hacen propensos a enfermedades crónicas, degenerativa y a la presencia de cáncer. Explicado en su expresión más simple, los radicales libres son átomos necesarios para la vida, pero que producidos en cantidades superiores a las justas llevan a todos estos procesos degenerativos.
Podemos tener esta sobrecarga, por ejemplo, por exposiciones excesivas al sol, contaminantes ambientales como el humo producido por los carros y el cigarrillo; así mismo, en alimentos que no son naturales. La clave para contrarrestarlos está en consumir antioxidantes, es decir, alimentos que tengan vitamina A, C y E. Es necesario reforzar rutinas como dormir 8 horas diarias; hacer ejercicio en las mañanas y no comer pesado en las noches, ni tomar bebidas estimulantes como el café o el té.
4. Romper paradigmas: no es fácil cambiar de hábitos, pues muchas veces llevamos haciéndolos desde la infancia. Pero ser conscientes de que algunas de nuestras dietas y las rutinas que llevamos no son los correctos, entonces debemos estar abiertos al cambio.
5. Busca cómo controlar el estrés: este puede ser causante de problemas digestivos, subida de peso, pérdida de la libido y flacidez en la piel que quiere decir, envejecimiento prematuro. Las claves para esto se basan en desintoxicar el cuerpo, tener una nutrición equilibrada que ayude al sistema digestivo a estar sano. Para esto, los expertos recomiendan evitar el azúcar blanca y las harinas refinadas, dejar las grasas saturadas. Además, tener una actitud siempre positiva, no dándole campo a los miedos y rencores.
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