Sin una declaración médica que certifique estar en buen estado de salud, las modelos no podrán ser contratadas
La ley francesa que prohíbe modelos ultra delgadas acaba de entrar en vigor.
Después de haber sido aprobada originalmente por la Asamblea Nacional de Francia a finales del 2015, la ley exige a los modelos que desean trabajar en el país a proporcionar certificados médicos de salud.
Explican que la ley entra en vigor no solo como mecanismo de protección para las profesionales de esta industria, sino como método para combatir la promoción de los ideales inaccesibles de la belleza.
“Exponer a los jóvenes a imágenes irrealistas de los cuerpos conduce a una sensación de autodesvaloración y de baja autoestima que puede afectar el comportamiento relacionado con la salud”, explicó Marisol Touraine, Ministra de Asuntos Sociales y Salud en Francia.
Las versiones anteriores del proyecto de ley sugerían imponer un mínimo de Índice de Masa Corporal (IMC) que determinaría la salud de las modelos.
Sin embargo después de las vehementes protestas de las agencias (y de la industria en general), finalmente se llegó a un acuerdo en que los médicos tienen la última palabra para decidir si la modelo está apta para trabajar según su estado de salud.
Así que si bien el IMC no es el factor decisivo, igualmente la ley obliga a los médicos a prestar mucha atención a las medidas de las modelos.
Y aunque Francia no sea el primer país en introducir una legislación de este tipo en Italia, España e Israel, hay leyes similares donde sí se exige un IMC mínimo.
Pues según las directrices de la Organización Mundial de la Salud, un adulto con IMC inferior a 18,5 se considera bajo peso, inferior a 18 desnutridos y inferior a 17 desnutridos severos- lo preocupante es que el modelo promedio hoy en día tiene un IMC de 16.
Por eso ésta modelo decidió engordar para ser feliz.
Aún así, numerosos estudios en los últimos años han indicado que el IMC no es tan preciso en la predicción del estado de salud general como se pensaba anteriormente pues consideran que no es una medida confiable.
Exigir que el examen médico sea el factor que controla si una modelo se considera lo suficientemente sana para trabajar podría ser más efectivo. Pues lo cierto es que el IMC tiende a generalizar y olvidar las individualidades de la persona en cuestión (es que hoy en día ¿qué se considera una talla grande?)
¡Y la cosa va en serio! Las violaciones a la ley tendrá fuertes consecuencias.
Los empleadores que infrinjan la ley al contratar a modelos sin la declaración de un médico podrían enfrentar multas de hasta 75,000 euros (230 millones de pesos colombianos aproximadamente) y hasta seis meses en la cárcel.
Así mismo, a partir del 1 de octubre entrará en vigor una ley sobre el uso comercial del photoshop.
Cualquier foto utilizada para anuncios comerciales de modelos que hayan sido alterados digitalmente, deberá incluir un texto que lo califique de “fotografía retocada”.
Esto incluye todo tipo de alteraciones que se le hayan realizado al cuerpo, ya sea para hacerlo parecer más grande o más pequeño.
Los infractores de esta ley también pagarán un alto precio por ello.
Serán multados con una cifra desde 35,000 euros (120 millones de pesos colombianos aproximadamente) hasta el 30 por ciento del presupuesto de producción del anuncio.
Lo cierto es que dado el importante papel de Francia en la moda, este paso hacia una pasarela más sana podría tener un impacto gigante en la industria en general.
Y que finalmente pasemos de tener modelos de ropa a modelos a seguir.