Se encienden las alarmas por el estado de salud de la monarca británica. Conoce el minucioso protocolo que se activará cuando fallezca.
Cuando la reina Isabel II muera se activará una operación conocida como London Bridge, diseñada detalladamente por el Palacio Real desde los años 60. El Reino Unido vivirá una situación similar a una emergencia nacional, y no es para menos, cuando la monarca fallezca será el final de una importante era.
Sonarán alarmas de emergencia, la radio y televisión cortarán sus emisiones, la bolsa de valores cerrará, el Parlamento tendrá que reunirse tan pronto como sea posible, la gente regresará a sus hogares… estas son apenas algunas de las cosas que sucederán cuando la información se haga oficial.
Puede que no todos sepamos con certeza cuáles son sus funciones, pero sabemos que es la reina desde hace varios años, e incluso muchos solo la hemos visto a ella ocupando el trono británico, pues está ahí desde hace 70 años. Por lo que su muerte será una noticia que impacte al mundo entero.
Merece una despedida a la altura de su importancia, porque es, sin duda, uno de los personajes más destacados de la historia reciente. Ella sabe que deja un legado impresionante, y, de hecho, cada parte de la operación London Bridge fue aprobada por ella y su equipo de trabajo.
En el 2017 el diario británico The Guardian publicó minuciosamente la operación que se llevaría a cabo una vez Su Majestad fallezca. Conoce uno de los protocolos más elaborados y significativos en la historia de la familia real.
La primera persona en enterarse de la muerte será -probablemente- su médico personal Huw Thomas y, posteriormente, su familia. Pero, el primer oficial que conocerá la información será Edward Young, secretario privado de la reina.
“El puente de Londres se cayó”, será el mensaje clave que Young deberá decirle a la primera ministra, Elizabeth Truss, para informarle la muerte de la monarca.
No es la primera vez que la familia real utiliza palabras clave para transmitir la muerte de un soberano. En 1952 “Hyde Park Corner” fueron las palabras para difundir el fallecimiento de Jorge VI.
Luego, los funcionarios más importantes del Reino Unido serán los siguientes en conocer que “el puente de Londres se cayó”.
A su vez, se transmitirá la noticia a los 15 países donde ella es jefa de Estado y a la Mancomunidad de Naciones, una organización de 54 países soberanos independientes y semi independientes que comparten lazos históricos con el Reino Unido.
Probablemente pasarán un par de horas antes de que la noticia de que la reina murió se haga pública. Así sucedió con la muerte de Jorge VI, su padre. De acuerdo con The Guardian el entonces rey fue encontrado muerto a las 7:30 A.M. y fue hasta las 11:15 A.M. que la BBC informó los hechos.
No obstante, esta vez será ligeramente diferente. Anteriormente la BBC era el medio oficial para informar sobre las muertes de la familia real. En esta ocasión la noticia se transmitirá a agencias globales de noticias. Finalmente, la noticia se extenderá por el mundo mediante diferentes medios de comunicación.
Al mismo tiempo, un soldado vestido de luto pondrá un comunicado con bordes negros en la puerta del Palacio de Buckingham que indicará la muerte de la soberana y el inicio de diez días de luto. Este mismo comunicado se publicará en la página oficial de la familia real.
The Guardian explicó que los diferentes medios de comunicación tienen sus propios protocolos a seguir una vez se haga pública la noticia.
Por ejemplo, la BBC tiene un sistema de alarma llamado R.A.T.S. (sistema de alarma radial, por sus siglas en inglés) que se activará exclusivamente cuando se haga oficial el fallecimiento de Isabel II. Este fue el sistema de alarma que se utilizó durante la época de la Guerra Fría.
Las emisoras cuentan con una red de luces llamada Obit, estas suelen encenderse en caso de catástrofes nacionales. Pero, cuando la monarca muera, la red de luces se activará y los DJs deberán poner música tranquila para preparar a los oyentes a recibir semejante noticia.
Por otra parte, los presentadores de noticias han estado ensayando la presentación de los hechos. Además, ellos deberán vestir de negro y comunicar la noticia con un tono de voz triste.
El nuevo soberano de Reino Unido será Carlos de Gales, el hijo mayor de Isabel II y Felipe de Edimburgo. Al día siguiente de la muerte de su madre se convertirá en rey, a las 11 A.M.
No obstante, su coronación oficial deberá esperar un tiempo prudente para enfrentar su duelo y en respeto a la reina. De hecho, la coronación de la monarca, tras la muerte de Jorge VI, fue tras más de un año del fallecimiento del entonces rey.
Luego de diez días de la muerte de la reina, se enterrará su cuerpo en la cripta real de la capilla de San Jorge en el Castillo de Windsor. Ese día la gente no tendrá que trabajar, la bolsa de valores no abrirá, asimismo, los bancos y tiendas cerrarán. El día del funeral de Isabel II marcará el final de una era.