Entre lágrimas, la actriz confesó el duro momento que pasó, luego de quedar embarazada.
Juliana Galvis tuvo una dura conversación en una entrevista durante el programa “La Sala de Laura Acuña”. La actriz comentó que con quien era su esposo en ese entonces, Pedro Dávila, pasaron por un mal momento en la relación, pero decidieron trabajar en ello y se fueron a vivir a México.
La pareja vivía en Estados Unidos, pero a Dávila le ofrecieron un buen puesto en el país mexicano y establecieron que sería una buena opción para fortalecer la familia junto a su pequeña hija Ágatha y su perro Ramón. “A Pedro le ofrecieron un trabajo en México. En ese momento, digamos, no estábamos tan bien. Sin embargo, quedo embarazada”.
Conmovida, la famosa relató cómo fue la experiencia de haber perdido a su hijo y la causa del fatal suceso: “Volvimos a Bogotá a arreglar la maleta y cuando estábamos organizando todo para irnos, me di cuenta que había perdido el bebé. Pero nos fuimos para México a apostarle a la familia. La apuesta la perdimos, pero tuvimos experiencias lindas allá (...) Estuvimos guerreándole al matrimonio dos años”.
Después que descubrió que estaba esperando un bebé, la actriz recordó que hace poco se había aplicado una vacuna en Estados Unidos. De inmediato, consultó a varios médicos sobe los efectos de la inoculación porque cuando ella decidió inyectarse con el fármaco, no sabía que estaba encinta.
“Cuando me di cuenta, comencé a averiguar y era una vacuna de sarampión, rubéola, tatatá. Empecé a llamar a todos los médicos en Colombia y me decían: ‘El riesgo de pérdida es muy alto o de malformación es muy alto’”.
Sin embargo, Juliana puso toda su fe en el embarazo en incluso llamó a su bebé León. Cuando la actriz llegó a Colombia de su experiencia en México, decidió hacerse chequeos para verificar que la salud de su bebé estuviera bien, pero el corazón del niño no latía: “Yo le había puesto León porque sentía que él había sobrevivido a lo de la inyección. Era un león, como los leones de la selva, que todo lo pueden. Y pues no, parece que León se había muerto en la semana seis”.
Galvis confiesa que ese momento la afectó en gran medida: “Yo tenía 16 semanas y el man quería estar al lado de su mamá durante todo ese tiempo. (Me dio) Durísimo, durísimo. Yo creería que los hombres se enamoran de sus hijos cuando los ven, las mujeres nos empezamos a enamorar desde que los tenemos en la panza y nos enamoramos perdidamente”.
La pareja, al final, terminó divorciándose. La artista santandereana comenta que ambos sentían mucho amor por el otro, pero las vidas de ambos y los dos, como personas, habían cambiado, por lo que decidieron optar por la separación, luego de 10 años de relación.